La misma actitud negligente hacia los riesgos se puede observar en la Región del Bío Bío. Resistencia al cambio, picardía, viveza y deslegitimación de la autoridad son algunas de las lecturas al respecto.
Es importante no sólo quedarnos en los derechos que se han visto vulnerados, sino, más bien, es el momento de continuar trabajando para reforzar la participación de las PcD (personas con discapacidad) y las organizaciones que los representan en la toma de decisiones y en el diseño de estrategias de prevención.
En la Región del Bío Bío viven 1.375 en dicha realidad, de las cuales, cerca de 700 viven en la intercomuna de Concepción y Talcahuano, siendo uno de los principales grupos de riesgo para contraer y expandir la enfermedad.