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Vivir en la calle: Los más vulnerables entre los vulnerables a la Covid-19

En la Región del Bío Bío viven 1.375 en dicha realidad, de las cuales, cerca de 700 viven en la intercomuna de Concepción y Talcahuano, siendo uno de los principales grupos de riesgo para contraer y expandir la enfermedad.

Por: Mauro Álvarez 25 de Mayo 2020
Fotografía: Isidoro Valenzuela M.

Mucho se ha hablado de cuidar a los adultos mayores y enfermos crónicos ante el avance del coronavirus en el país, pero qué pasa con otro de los grupos vulnerables, ese invisibilizado y, por qué no decirlo, olvidado por la sociedad, las personas en situación de calle.

En la Región, actualmente, existe una población mil 375 personas en dicha realidad, de las cuales, cerca de 700 viven en la intercomuna de Concepción y Talcahuano, convirtiéndolos en el principal foco de riesgo al estar expuestos precisamente en las calles.

Es por ello que, desde el Ministerio de Desarrollo Social, este año y a raíz de la Covid-19 son varias las medidas que se han tomado para ir en ayuda de este grupo objetivo, sobre todo ahora, que se acercan los días más fríos, a través del Plan Invierno.

“Considerando que ya tenemos operativos algunos dispositivos, esperamos que a fin de mayo podamos tener al 100% de la oferta disponible, estamos hablando de 19 albergues, diez rutas calle y cuatro rutas médicas en la Región (una por cada Servicio de Salud), con una inversión de $920 millones”, explicó el seremi de Desarrollo Social, Alberto Moraga.

Nuevos protocolos

Actualmente, está en funcionamiento un albergue en calle Trinitarias, al que se sumarán tres más y uno de refuerzo en caso de ser necesario. “El Plan Invierno viene con un dispositivo complementario que se llama Calle Protege, cuya prioridad son adultos mayores y enfermos crónicos en situación de calle, el cual está funcionando desde fines de abril”, comentó el seremi Moraga.

En cuanto a cómo funcionarán estos hogares debido al coronavirus, el seremi añadió que se redujo la cantidad de camas. “Hoy sólo hay un máximo de 20, con un metro de distancia entre ellas, además de horarios diferidos de comidas”, dijo.

En la eventualidad de existir un caso sospechoso de covid-19 o con la enfermedad, sin que sea necesaria su hospitalización, Moraga dijo que disponen de piezas individuales con baño en casa residencia con todos los resguardos. Aquellos que permanezcan en calle, a través de las rutas médicas, se les derivará a los centros asistenciales.

“Si bien es obvio que vamos a tener más contagios, intentaremos que sean los menos posible, por la vulnerabilidad de los grupos en situación de calle”, sostuvo la autoridad social.

En el Hogar de Cristo, se han tomado protocolos en la hospedería de hombres de Concepción, desde el 24 de marzo.

“Partimos con 49 personas, quienes nos pidieron resguardar su salud física y emocional, lo que significó un replanteamiento, porque la hospedería funcionaba desde las 6 de la tarde hasta las 8 de la mañana, cambiando residencia a 24 horas, con prestaciones que antes no entregábamos, es decir: almuerzo y once”, señaló el jefe social Concepción–Arauco de la institución, Luis Cuevas.

En cuanto a los desafíos que han enfrentado, comentó Cuevas, es la abstinencia al alcohol y otras drogas de quienes voluntariamente han decidido quedarse en cuarentena en el hogar, a quienes han apoyado a través del tratamiento médico y psicológico por parte de profesionales.

Sobre cómo es vivir dentro de la hospedería, el usuario Rodrigo Pozo expuso que “al ser esta nuestra casa, cada uno debe participar, ha sido un cambio de vida fundamental”. En tanto, Roberto Cifuentes, añadió que “como usuarios, nuestro deber es ayudar a los más ancianos, dándoles su comida a los que están haciendo cuarentena y lavar su ropa de ser necesario”.

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