Auxilia a las familias, pero preocupa el excesivo gasto fiscal, la presión inflacionaria y menor motivación al trabajo por entrega de bonos, todo lo cual atenta en contra del mercado laboral y la propia reativación económica.
Destacaron las alzas de educación y transporte, y la disminución de alimentos y bebidas no alcohólicas.
Productos como alimentos, bebidas y vehículos nuevos confirman la percepción de los penquistas: que todo pareciera estar más caro últimamente
Con los efectos de la pandemia, especialmente sobre el mercado laboral, lo más probable es que el país requiera mayores estímulos fiscales y monetarios hasta que se vean señales claras de una recuperación robusta.
El instituto emisor prevé que la TPM seguirá en su nivel mínimo durante gran parte del horizonte de política monetaria de dos años para mantener la inflación contenida, misma que tuvo un alza de 3,1% gatillado en parte por el retiro del 10%.