Los frascos de conserva ya no se conocen, la ropa se bota en buen estado, el remendador de calzado desapareció de nuestros barrios y los restos de verdura ya no sirven de alimento para animales.
Para entender el problema de fondo, debemos señalar que la ciudadanía constituye el estatus que ostenta una persona, y que tiene su base en la pertenencia a una determinada comunidad política.
Urgen espacios institucionales de participación que informen, planifiquen y creen la infraestructura necesaria para hacer la bicicleta un modo de transporte seguro frente a otros.