Mejor el reel, el video, el mensaje estruendoso y la promesa irrealizable. Este círculo vicioso nos lleva a un empobrecimiento de la Política (con mayúscula) y del debate cívico. Líneas rojas se cruzaron en esta campaña.
La paradoja es evidente: mientras el discurso político habla de sustentabilidad, el pescador lucha por sobrevivir a un modelo que lo excluye y lo castiga por existir en la escala equivocada. Es como si Aquiles tuviera que correr descalzo, mientras la tortuga se desplaza sobre una Tahoe institucional. Entonces, como en la paradoja de Zenón, la solución no está en correr más rápido, sino en reconocer que la carrera es la equivocada.