La Región pasa por su mejor momento desde la llegada del coronavirus en marzo de 2020. La prudencia respecto a los contagios futuros es, sin embargo, la política más acertada.
Ese debate está más vigente que nunca en Chile. Recientemente se supo que un solo actor está a punto de controlar la mitad de las ventas de los supermercados de todo el país. El gigantismo suele acompañar el control de mercado y la imposición de precios.
Las cifras, favorablemente, están controladas en la Región, donde ayer se informó la cantidad más baja de casos activos en mucho tiempo. Sin embargo, hay que mantener los cuidados.
Chile apunta a desarrollar ciudades con visión a largo plazo, acogedoras y aptas para personas diferentes y con necesidades particulares, con densidad adecuada y más eficientes en la utilización de sus recursos.
Las estadísticas revelan que la acción humana es la causa principal de los siniestros de tránsito: imprudencia, pérdida de control del vehículo y desobediencia a la señalización.
Uno de cada cuatro conductores fiscalizados en las Fiestas Patrias de 2019 había consumido alcohol, según cifras entregadas por el Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol.