Techo, camas limpias, comida y ducha caliente, ofrecen las residencias penquistas, que buscan devolverles la dignidad y asegurar una noche tibia a las personas en situación de calle.
Las dos últimas personas fallecidas, de Tomé y Lebú, no contaban con la vacuna preventiva.
Autoridades advirtieron de los peligros del sector en donde se produjo la caída de rocas, árboles y barro. Camino sigue cerrado y ayer se logró sacar los autos que estaban en el lugar.
Los fondos serán gestionados por la Municipalidad de San Pedro de la Paz y su puesta en marcha se concretará el primer año del convenio suscrito con Infor.