Petitorios van desde el rechazo al TPP11 hasta críticas a las nuevas modificaciones propuestas por el Consejo Nacional de Educación para los cursos de Historia y Educación Física.
Tres semanas movilizados cumplieron estudiantes universitarios de las tres casas de estudios, que tiene su sede central en Concepción.
El mayor auge se vivió esta semana, en donde aumentó la virulencia por parte del estudiantado, a lo que se sumó el paro indefinido por parte del Colegio de Profesores.
Para evitar este tipo de hechos, desde las distintas universidades locales hacen un llamado al diálogo por parte de la comunidad universitaria, puesto que hay temas que pueden ser debatidos, pero que no van a encontrar solución interna.
Mediante una carta a la comunidad, el rector de la Universidad de Concepción, Carlos Saavedra, manifestó su preocupación ante “la forma violenta en que algunos sectores están manifestando su desacuerdo con cuestiones de orden nacional y otras estrictamente de carácter interno”.
A lo anterior, sumó que desde rectoría existe una voluntad concreta y disposición para establecer mecanismos de diálogo que permitan abordar los rezagos históricos en la institución, a lo que se suma el análisis a políticas públicas en los denominados “Diálogos del Presente”.
Desde la casa de estudios consideraron que con lo anterior, la Universidad constituye un centro de pensamiento crítico frente a materias que determinan el tipo de desarrollo del país y la calidad de vida de sus ciudadanos.
“La universidad quiere insistir en este camino de diálogo y debate democrático nos permitirá evitar las consecuencias negativas inherente a la interrupción de las actividades académicas regulares y erradicar formas de violencia hacia la comunidad, como lo son las tomas de facultades y otras unidades académicas”. Esto afecta el normal desarrollo de las actividades universitarias, lo que representa una fracción altamente significativa de nuestras actividades diarias, agregaron.
También rechazaron el daño al patrimonio que se produce al interior del Campus, el que puede traer consecuencias a la institución, a raíz de la credibilidad por su conservación, por lo que se aplicarán todas las atribuciones reglamentarias y legales en contra de quienes persistan en atentar en contra del patrimonio.
Por último, la casa de estudios adelantó que dentro de las próximas semanas establecerán un procedimiento de consulta a la comunidad universitaria sobre la validez de las formas empleadas por los estudiantes movilizados para expresar sus demandas.
A este último punto, Saavedra agregó que “será una consulta electrónica y es necesario que los espacios universitarios estén disponibles para el diálogo. Tenemos una serie de actividades para la comunidad y ya estamos trabajando en las preguntas que tendrá esa consulta”.
En tanto, en la Ucsc, la situación no es muy distinta. En dicha casa de estudios permanecen siete edificios en toma y una docena de carreras movilizadas.
El rector, Christian Schmitz, manifestó que las puertas de rectoría se encuentran abiertas para el diálogo y que algunos estudiantes ya lo han utilizado. “Desde siempre hemos dicho que cualquier problema se soluciona conversando, tenemos instancias de diálogo con los representantes estudiantiles, por lo que estamos con desazón, ya que no se han utilizado los canales de siempre”.
Raphael Sierra P.
La autoridad universitaria acusó que un grupo minoritario a través de medidas de fuerza busca lograr situaciones que se concentran en necesidades externas, como medidas políticas que van más allá de la universidad.
Mientras que en la Universidad del Bío Bío existen algunos edificios tomados en el campus de Concepción solamente.
La presidenta de la FEC, Valeria Tapia, aseguró que “hay más de seis facultades en toma, varias otras carreras movilizadas con varias temáticas, entre ellas el TPP. Esto es perjudicial para el desarrollo del conocimiento, a lo que sumamos el petitorio de educación como en salud mental, que se ha transformado en algo a nivel país y no ha habido pronunciamiento del Ejecutivo”.