¿Tu notebook ha comenzado a trabajar más lento? Descubre cómo mejorar su rendimiento con estas recomendaciones.
Si sientes que tu notebook se está volviendo lento o no está funcionando como debería, no te preocupes, hay varias soluciones que puedes probar para optimizar su rendimiento. En este artículo encontrarás algunos consejos para ayudarte a mejorar la eficiencia de tu computador.
Hay muchos factores que pueden afectar la rapidez y eficiencia de los computadores, como virus, acumulación de archivos innecesarios o falta de limpieza interna y externa. Estas recomendaciones son un buen punto de partida para abordar estos problemas y hacer que tu notebook trabaje mejor.
Las actualizaciones de seguridad y correcciones de errores pueden mejorar el rendimiento de un computador. Por eso, los fabricantes recomiendan que mantengas actualizado tu sistema operativo.
Para no tener que estar pendiente del lanzamiento de nuevas actualizaciones, solo tienes que habilitar las instalaciones automáticas en el menú de configuración de tu equipo (ya sea Windows o macOS). Así, el sistema verificará periódicamente si hay nuevas mejoras disponibles.
Los programas y aplicaciones que no utilizas ocupan espacio en el disco duro y consumen recursos del sistema, lo que puede provocar que tu computador funcione más lento. De manera adicional, algunos programas se ejecutan automáticamente en segundo plano y ralentizan el rendimiento del sistema sin que te des cuenta.
Borra lo que no usas y usa el espacio y la potencia del equipo para las tareas que si requieres en el día a día, haciendo la experiencia más fluida.
Realizar una limpieza de disco te permitirá eliminar archivos temporales que se acumulan con el tiempo y ocupan espacio, puedes eliminar archivos de caché del navegador, residuos de la papelera de reciclaje o archivos que se crean cuando instalas un programa.
También puedes pasar todo el contenido antiguo a una unidad de almacenamiento externa y así librar la carga de trabajo.
Desactiva los programas que se inician automáticamente al encender tu computador. Esto acortará el tiempo de inicio y liberará recursos de la memoria.
Estas tareas las puedes desactivar desde el administrador de tareas, simplemente seleccionando una aplicación y desactivándola o también, para no abrirse de forma permanente es posible hacero desde la configuración de cada aplicación.
Cambiar la configuración de energía puede optimizar el rendimiento de tu notebook y la duración de la batería. Por lo general, los equipos te permitirán elegir entre tres tipos de perfiles; Alto rendimiento, Rendimiento equilibrado o Ahorro de energía.
Ten en cuenta que las distintas opciones variarán según cada fabricante, modelo y sistema operativo.
Un Malware o virus, es un programa malicioso que afecta seriamente el rendimiento de un notebook, ya que ralentiza el tiempo de arranque, consume recursos del sistema y puede dañar archivos críticos, afectando la velocidad y el funcionamiento de los programas.
Asegúrate de tener instalado un software antivirus y ejecuta análisis periódicos para identificar cualquier problema a tiempo.
Comprueba que los ventiladores o entradas estén libres de suciedad y la refrigeración se haga de forma correcta, ya que un sobrecalentamiento puede estar causando problemas.
Por otro lado, si tu notebook ya salió hace algunos años al mercado, quizás existan programas o soluciones muy avanzadas que este no ejecute con fluidez. Dependiendo del modelo, puedes cambiar o añadir nuevos componentes como aumentar la memoria RAM o cambiar el disco duro a uno más moderno.
Como puedes ver, hay muchas formas de optimizar el rendimiento de un equipo. Es importante mantener tu sistema actualizado y realizar tareas de limpieza regularmente.
Ahora, si has probado estos consejos y tu equipo sigue trabajando de forma deficiente, siempre es positivo cambiar a un modelo más potente que se adapte a tus necesidades. Encuentra un notebook en oferta para conseguir el rendimiento que estás buscando.