Diversas interrogantes quedaron abiertas respecto al rumoreado cierre del penal Punta Peuco, promesa que el Gobierno que encabezó Michelle Bachelet no pudo cumplir.
Pero, ¿cuál fue el motivo por el que no se concretó el cierre del penal? Según informó La Tercera, el viernes pasado la ex Mandataria tenía planificado concretar una operación simbólica, donde se trasladaría a presos emblemáticos por violaciones a los Derechos Humanos a la cárcel Colina I. De esta manera, el recinto penitenciario habría pasado a tener un carácter humanitario, donde residirían presidiarios en situaciones especiales (enfermos terminales, mujeres embarazadas, entre otros casos).
Sin embargo, el que en ese momento era ministro de Justicia, Jaime Campos, se negó a firmar el decreto que llevaba la rúbrica de la Presidenta, en una actitud calificada como rebelde por sus colaboradores.
La propuesta de Bachelet contaba con el apoyo del ministro de Defensa, José Antonio Gómez, además de un informe técnico que precisaba cada paso de su ejecución.
En la lista de personas que se iban a trasladar se encontraba el ex jefe operativo de la CNI Álvaro Corbalán, condenado, entre otros hechos, por su participación en la Operación Albania; el brigadier (R) y ex agente de la Dina Miguel Krassnoff, recluido por su rol en múltiples actividades represivas, entre ellas el asesinato del líder del MIR, Miguel Enríquez; y Raúl Iturriaga Neumann, quien fue director asistente de la DINA y que cumple sentencia por varios ilícitos como la fallida tentativa de asesinato contra el demócrata cristiano Bernardo Leighton y su esposa en Roma, informó La Tercera.
Foto | La Tercera
Fuentes de La Tercera informaron que Jaime Campos había negado esa misma semana dar su firma para el indulto, visado por Bachelet, del ex miembro del Fpmr Jorge Mauricio Mateluna Rojas.
El plan de la ex Presidente era dar una señal política, con la liberación de Mateluna junto al cierre simbólico de Punta Peuco, en donde los principales rostros de la represión dejarían los privilegios del penal de Til Til para morar en un espacio de tres galerías con 10 celdas cada una, en una remodelación que significó una inversión de $1.500 millones en Colina 1.
Desde el círculo cercano al ex ministro afirman que nunca llegó un documento físico a sus manos para su firma. Otras fuentes consultadas se mostraron extrañadas con la postura de Campos, ya que él se mostraba de acuerdo con el movimiento de los detenidos.