El Centro de Ciencias Ambientales Eula-Chile de la Universidad de Concepción, creado hace 33 años, fue un hito para el estudio y cuidado de la Región del Biobío y el río del mismo nombre junto a su cuenca hidrográfica, la más importante del país en términos productivos.
Dr. Ricardo Barra Ríos
Director Centro Eula
Universidad de Concepción
El Centro de Ciencias Ambientales Eula-Chile de la Universidad de Concepción, creado hace 33 años, fue un hito para el estudio y cuidado de la Región del Biobío y el río del mismo nombre junto a su cuenca hidrográfica, la más importante del país en términos productivos.
Esta preocupación por los recursos hídricos y ecosistemas no solo existía entre los investigadores de la UdeC de aquella época, sino también en la comunidad internacional y en particular la italiana. Esta entregó los recursos para iniciar el gran proyecto de investigación, que más de tres décadas después pone a nuestra casa de estudios como líder en la temática ambiental del país.
Sin embargo, para que un proyecto de colaboración internacional que inicialmente solo duraría tres años haya perdurado por más de treinta, fue necesario que los líderes de entonces tuvieran la visión de formar las capacidades entre quienes luego estarían a cargo de esa gestión en los años venideros.
En ese camino este proyecto permitió la construcción de capacidades científicas con ayuda de los colegas italianos, pero vinculadas a los problemas que existían en el Chile de los años noventa, y que en muchos casos han seguido existiendo a lo largo de todos estos años.
Esta formación asociada a la investigación ha permitido la sostenibilidad del Centro Eula que hoy conocemos, y además nos enseña que un liderazgo apropiado y con visión de futuro está siempre ocupado de los temas ambientales emergentes y en desarrollo. Entre estos la crisis climática y la pérdida de biodiversidad, además de la contaminación y la degradación de los suelos.
Sin embargo, queremos indicar que seguiremos aportando con soluciones locales a los enormes problemas ambientales globales, lo que actualmente es el objetivo primordial del Centro Eula. Para ello, será clave continuar con la colaboración permanente que nos une con todos los actores de la Región del Biobío, tanto del sector público como privado, así como también con las comunidades a través de la vinculación con el medio, avanzando juntos hacia el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo Sostenible, hoja de ruta para el tránsito a una sociedad resiliente a los impactos de la crisis ambiental global.
Por todo ello, para correr el cerco hacia metas más ambiciosas de sostenibilidad, equidad y bienestar social, apostamos por la conjugación de cada uno de los aspectos ya descritos, ya que es en esa unión donde reside el corazón del impacto de la investigación que desarrolla el Centro Eula, que esperamos siga siendo un aporte universitario al desarrollo sostenible de la región, el país, y todo nuestro planeta.
No puedo terminar esta columna sin referirme a la noticia que puso en entredicho nuestra calidad y por supuesto nuestra historia, por una acusación gravísima en contra de nuestro Laboratorio de Ensayos por parte de la Superintendencia de Medio Ambiente (SMA), por emitir informes para los cuales supuestamente no tendríamos autorización. Pues bien, para llegar a la expresión del análisis que informamos, utilizamos un método acreditado, que solo necesita de un factor matemático para determinar el resultado que solicitan muchas resoluciones de calificación ambiental, y allí reside nuestra controversia con la SMA, que confiamos se resuelva considerando los aspectos técnicos involucrados. La calidad de nuestros análisis se sustentan en más de 30 años de trabajo y en evaluaciones positivas del desempeño de la misma autoridad que hoy nos cuestiona.