El análisis de aguas residuales ayuda a comprender no solo la presencia de patógenos o el estudio de enfermedades, también, nos aporta en el entendimiento y el uso de diferentes compuestos dentro de la población.
DR. MATÍAS HEPP
Director Centro de Vigilancia de Aguas Residuales Centinela Biobío de la UCSC
Cuando hablamos de alcantarillas nuestra mente va directamente a relacionarlo con basura, desechos o algo que no debería tener nuestra atención. Pero si miramos más a fondo, las aguas residuales pueden ser consideradas los intestinos de las ciudades, ya que contienen todo lo que nuestro cuerpo elimina.
Esto nos muestra que desde ahí podemos obtener mucha información sobre la salud de nuestra población, por ejemplo, la circulación de diferentes patógenos (hepatitis A y E, norovirus, rotavirus, SARS-CoV-2, polio salvaje y derivado de vacuna, etc.), así como también los productos de contaminantes emergentes o desechos derivados del consumo de sustancias de abuso.
Durante la pandemia, nuestro equipo logró el monitoreo del SARSCoV-2 y sus variantes en aguas residuales de la Región del Biobío, estableciendo una estrategia de detección complementaria que ya es utilizada en países desarrollados, debido a que se obtiene información de grandes comunidades a bajo costo y permite detectar y medir individuos presintomáticos y asintomáticos.
Con esta información, las autoridades pudieron establecer focos de contagio y la llegada de nuevas variantes, permitiendo enfocar los recursos en el monitoreo de esos focos, atención oportuna, agilizar procesos de vacunación y prevención.
Además, el análisis de aguas residuales ayuda a comprender no solo la presencia de patógenos o el estudio de enfermedades, también, nos aporta en el entendimiento y el uso de diferentes compuestos dentro de la población, como lo es el uso de agentes de limpieza, medicamentos, sustancias de abuso, entre otros, proporcionando en cierta medida un aspecto importante en la salud de la comunidad producto de la variedad de sustancias circulantes y que afectan el bienestar de la población.
Pero ¿de qué sirve saber todo esto? Esta información permite a las autoridades de Gobierno, seguridad pública, salud y educación, iniciar el desarrollo de políticas públicas específicas a nivel local, regional y nacional, enfocadas en las necesidades de su población, lo que mejora considerablemente la gestión y distribución de recursos. En marzo de 2021, la Unión Europea publicó un documento que destaca y alienta a establecer sistemas de vigilancia en aguas residuales como una herramienta complementaria de datos y gestión de la pandemia, con foco en la aparición y propagación de nuevas variantes del virus.
Estos sistemas de vigilancia propuestos no existen a nivel latinoamericano y, hoy, estamos enfocados en establecer un nicho de innovación en el estudio de aguas residuales en nuestra región con el apoyo del gobierno regional del Biobío, para apoyar la toma de decisiones en políticas públicas en salud, bienestar, seguridad y prevención. Porque sabemos que siempre es mejor prevenir que curar.