Esperamos que estas propuestas, reflexiones y aportes a la Nueva Constitución sean un avance significativo en establecer los derechos culturales de los y las chilenas.
Pablo Gaete Villegas
Magíster en Arte y Patrimonio UDEC
Director Regional de Balmaceda Arte Joven
Hace un par de semanas y desde la ciudad de Arica, representantes de la Comisión de Sistemas de Conocimiento, Ciencia y Tecnología, Cultura Arte y Patrimonio que integran la Convención Constitucional, anunciaron la primera propuesta de norma de “Derechos Culturales” que, de ser aprobada, pasaría a formar parte del nuevo texto constitucional en esta materia.
En el artículo correspondiente al principio de interculturalidad, la propuesta sostiene que “la (nueva) Constitución reconoce la igual dignidad de las diversas culturas, y garantiza su respeto y promoción, junto con la protección y salvaguardia de todas las formas de expresiones culturales, prácticas, artes, tradiciones culturales, saberes, lenguas nacionales o regionales y dialectos de las distintas comunidades, pueblos y naciones que conviven en el país.” El texto agrega que “la Constitución asegura el derecho de todas las personas a participar libremente en la vida cultural de las comunidades, pueblos y naciones”.
Al mismo tiempo asigna un importante rol al Estado al indicar que éste deberá “promover el desarrollo y difusión de las culturas, las artes y los conocimientos, atendiendo a la diversidad cultural en todas sus manifestaciones y contribuciones, con pleno respeto a la libertad creativa, la libertad de investigación y las autonomías que consagra esta Constitución”. Junto a lo anterior la propuesta indica que “el Estado garantizará los recursos para hacer efectiva la descentralización y autonomía de las decisiones de las regiones, localidades y pueblos en esta materia, reconociendo su identidad y diversidad territorial.”
Con anterioridad, otras instancias, organizaciones e instituciones vinculadas al sector cultura también entregaron sus propuestas. Uno de esos documentos fue elaborado por la Propuesta de Acuerdo Social, iniciativa liderada por la Universidad de Chile y que pone acento en la concepción de un Estado plurinacional y pluricultural, la definición de cultura como un bien público y común, el derecho a la identidad cultural y el derecho a la cultura como un derecho humano. También desde el mundo académico e intelectual han surgido otros documentos que proponen construir una red de protección que atienda las necesidades específicas de la fuerza laboral que constituyen los y las trabajadoras del sector cultura, de modo de garantizar su posición central en el desarrollo de la sociedad. Es lo que destaca el actor y gestor cultural Jaime Mondría en un documento publicado en el periódico Le Monde Diplomatique, donde llama la atención al hecho que “las y los trabajadores de la cultura, las y los cultores que portan saberes ancestrales, las y los artistas, intérpretes y ejecutantes, las y los creadores de la cultura, las y los productores culturales y sus equipos técnicos no están siendo contemplados en los discursos constituyentes”.
Esperamos que estas propuestas, reflexiones y aportes a la Nueva Constitución sean un avance significativo en establecer los derechos culturales de los y las chilenas. Un avance civilizatorio de todo el país. Y que se manifieste en la práctica en un reconocimiento y valoración de nuestra diversidad cultural y territorial. Y en el reconocimiento de los saberes ancestrales tanto tiempo ignorados e invisibilizados de los pueblos indígenas. Sería un gran paso para incorporar realmente a la cultura como un componente esencial de nuestro desarrollo como nación.