Opinión

Telescopio espacial James Webb: Un futuro prometedor con un costo que nadie se imagina

WST pondrá a disposición una gran cantidad de nueva información sobre el cosmos, nuevos descubrimientos, pero, ¿estaremos preparados para recibirla?. Muy probablemente nuestra visión del universo y de nuestra propia existencia cambie 180°, este es el verdadero costo.

Por: Diario Concepción 06 de Enero 2022
Fotografía: Cedida

Katherine Henríquez Brocal
Lcda. y Magíster en Astronomía
Universidad de Concepción.

“Con esa cantidad de dinero hubiese preferido construir hospitales que andar buscando galaxias”, fue lo que me dijo un taxista de regreso a mi casa después de una larga charla sobre astronomía.

El Telescopio espacial James Webb (nombrado JWST por sus siglas en inglés), es casi tres veces más grande que su predecesor el telescopio espacial Hubble, con un costo de 10.000 millones de dólares y un tiempo de construcción de más de 20 años, promete obtener las imágenes con una resolución nunca antes vista. Pretende ser capaz de observar las primeras estrellas del universo, sin embargo también podremos obtener información de nuestro vecindario estelar, las atmósferas de los planetas extrasolares y la observación de objetos sumamente débiles en luminosidad.

Probablemente hayas escuchado esta información cientos de veces, pero yo quisiera hablarte de la enorme inversión que es poner en el espacio un objeto como este.

Imagina por un momento que al jefe de la NASA le llega un empleado diciendo que quiere construir un telescopio del tamaño de una cancha de tenis y que quiere no solo todo el dinero disponible de la agencia, sino que además quiere el de otras dos, el de la ESA (European Space Agency) y la CSA (Canadian Space Agency), por último quiere bañarlo en 48 gramos de oro. ¡Que buena idea!, le responde el jefe, ¡hagámoslo!. Es más o menos así como en 1996 comienza la construcción de JWST para ser lanzado recién este 25 de diciembre del 2021.

Quiero dejar claro que lo antes señalado es una parodia, pero no se aleja mucho de la realidad. Existen muchos tecnicismos que le darán validez al proyecto, pero con esto quiero demostrar que las grandes revoluciones en la ciencia comienzan con personas que se salen de los esquemas y hacen posible lo que creíamos era imposible hasta ese entonces.

Sí, es costoso construir un telescopio de esta envergadura, sin embargo los beneficios son incalculables. El estudio y la investigación de nuevas tecnologías trae consigo descubrimientos que, en un futuro, podrían ser aprovechados por todos. Nuevas tecnologías que podrían ser ocupadas luego en hospitales, empresas o en tu hogar. Cientos de personas ya se beneficiaron de esto y lo seguirán haciendo, desde los transportistas de materiales hasta los ingenieros que armaron el JWST.

Pero hay otro costo que asumir, no monetario. Los secretos que serán revelados por JWST podrían cambiar totalmente nuestra percepción del universo. Fue Edwin Hubble, en 1924, quien descubrió que existían otras galaxias además de la nuestra, este hito marcó una revolución del pensamiento para aquella época. Las personas comenzaron a darse cuenta que el universo no era grande sino gigantesco.

Imaginemos por un momento que logramos rastrear planetas con claros signos de vida, esto para algunas personas es muy fuerte de aceptar. Probablemente más de alguno necesitará terapia para lidiar con aquello. Quizás, esto es una exageración ahora, pero algún día se hará realidad, si no es con JWST, será con otro telescopio.

JWST pondrá a disposición una gran cantidad de nueva información sobre el cosmos, nuevos descubrimientos, pero, ¿estaremos preparados para recibirla?. Muy probablemente nuestra visión del universo y de nuestra propia existencia cambie 180°, este es el verdadero costo. Totalmente inevitable.

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