Opinión

La elusiva belleza de lo intraducible. Parte 2: “Wykombinowac”

Cómo influye el contexto cultural del emisario en un mensaje a una civilización alienígena? ¿Es lo mismo enviarlo hoy que en 1000 años más? ¿Estamos listos para un encuentro cercano?

Por: Diario Concepción 04 de Marzo 2021
Fotografía: Cedida

Dr. Roger Leiton THompson
Centro para la Instrumentación Astronómica (CePIA). Departamento de Astronomía, Universidad de Concepción.

Somos seres sociales: nos gusta juntarnos, hacer equipo, compartir momentos intensos de alegría y decepción. Una sociedad es, en esencia, la proyección de nuestros cerebros conectados unos con otros, actuando en una gran red de interacciones más compleja que la mera suma de las mentes individuales que la forman, en donde no sabemos dónde empieza un cerebro o termina otro. La sociedad depende de nuestra capacidad de interpretarnos entre nosotros; por esto buena parte de la actividad cerebral se ocupa en juzgar las intenciones de los demás, desde los más sesudos argumentos científicos hasta sutiles gestos de coqueteo. Adoramos contar y escuchar historias. Todo esto es mediado por una compleja herramienta: el lenguaje humano. Y ¿qué lenguaje podríamos usar con un alienigena?

Las abejas indican direcciones bailando; el camaleón cambia de color como advertencia; arboles conversan usando hormonas. Muchos seres se comunican pero no hay nada comparable al lenguaje humano. Este hace uso de sofisticados conceptos abstractos y los combina ingeniosamente, comunicando así una vasta cantidad de pensamientos. Combinando vocablos evocamos el pasado, imaginamos posibles futuros, creamos universos enteros. Una oración de 20 palabras podría organizarse en trillones de formas posibles, reflejando así todos los potenciales pensamientos a comunicar por el lenguaje. A pesar de las obvias diferencias, los 6000 idiomas existentes tienen rasgos universales: verbos, sustantivos, pronombres, así como el uso del pasado y del futuro. ¿Podría una inteligencia extraterrestre captar esos patrones? ¿Habrán patrones universales para entendernos con E.T.?

El lenguaje se forma sobre ciertos supuestos que hacemos acerca de cómo funciona el mundo, de otra forma no podríamos operar correctamente en él. Por otro lado, los componentes del Universo interactúan entre ellos siguiendo reglas: las Leyes de la Naturaleza. Asumir que estas leyes son las mismas en todo el Cosmos quizás sea un punto de partida para cruzar palabras con E.T. Describimos las Leyes de la Naturaleza usando matemáticas, números y lógica. Así, E.T. podría compartir las mismas matemáticas nuestras. Por ejemplo, el 7 pertenece a los Números Primos (aquellos divisibles sólo por sí mismos y por 1) independientemente de la cultura, sea terrestre o extraterrestre. O al menos así debería ser.

Hay monos, ratones, aves y otros animales con la habilidad de contar y de distinguir entre cantidades. Pero, el pueblo Pirahã del Amazonas no ha desarrollado el concepto de número más allá de la idea general de grandes o pequeñas cantidades. ¿Por qué ciertos animales pueden contar y los Pirahã no? Quizás porque, como todo lenguaje, las matemáticas dependen del contexto. Los Pirahã podrían aprender a contar pero en su cultura no lo necesitan. ¿Cómo influye el contexto cultural del emisario en un mensaje a una civilización alienígena? ¿Es lo mismo enviarlo hoy que en 1000 años más? ¿Estamos listos para un encuentro cercano?

Link para ir a la Primera parte: https://www.diarioconcepcion.cl/opinion/2021/02/25/la-elusiva-belleza-de-lo-intraducible-parte-1-czuc-do-kogos-miete.html

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