Ya pueden cultivar lechugas en microgravedad, pero no solo de lechuga vive el hombre, así que aún deben llevar alimentos que cumpla nutritivamente sus necesidades y en muchos casos se tienen que diseñar alimentos con requisitos especiales.
Leidy Peña
Estudiante del Magíster de Astronomía
Universidad de Concepción
En la carrera espacial hoy en día no hay solo un destino, se espera llegar tan lejos como se pueda y el tiempo que tenga que tomar, estaciones claves como una la Luna pueden convertirse en un oasis en medio de un largo camino, por lo que es de suma importancia cómo vamos a mantenernos dentro de una nave espacial y cómo vamos a subsistir en un lugar con condiciones que no son las adecuadas para un funcionamiento normal de nuestro día a día.
Existen extensas rutinas de actividades que mantienen a los astronautas atentos, reflexivos y lo más importante que no estén aburridos en la Estación Espacial Internacional EEI, pero estamos tranquilos, los domingos ellos pueden dormir un poco más; actividades que van desde ejercitarse hasta realizar experimentos en distintos campos.
Pero, y lo más importante ¿qué toman?, ¿qué respiran?, ¿qué comen? Realizan un ciclo cerrado de reutilización de sistemas vitales como el agua y el oxígeno, con equipos que reciclan la orina y las aguas residuales para poder proveer de agua potable a la tripulación. Este ciclo se cumple en un 80% y la meta es cerrarlo completamente en algún momento, y es lo mejor que han podido hacer, no se pueden permitir llevar tantos litros de agua por cada astronauta, como dijo Meir, en la EEI “el café de hoy es el café de mañana”.
Ya pueden cultivar lechugas en microgravedad, pero no solo de lechuga vive el hombre, así que aún deben llevar alimentos que cumpla nutritivamente sus necesidades y en muchos casos se tienen que diseñar alimentos con requisitos especiales, por ejemplo, los alimentos que dejan migas puedan flotar en la cabina y dañar los equipos, así que sigue siendo un trabajo arduo pensar en la comida espacial.
Si se desea viajar tan lejos es primordial romper el cordón umbilical con la madre tierra, que se produzcan los alimentos donde se encuentren, pero aun así ¿sería segura comerla? En la actualidad existen proyectos gubernamentales como el de la Agencia Espacial Canadiense que inyectó fondos hace poco para ideas en distintas áreas de la exploración espacial que incluye tecnología alimentaria, o el Proyecto Moon Green, un español que pretende estudiar la germinación de una planta bajo gravedad lunar, y alrededor del globo hay premios esperando por grandes ideas en torno a esto, así que, si tienes una, ¡este es el momento!