Hincha de… acerero, huachipatino hasta la muerte.
Tu recuerdo más importante ligado al deporte: Cómo olvidar aquel 9 de diciembre del 2012, todo el país daba por campeón a Unión Española. La prensa santiaguina estaba de fiesta, pero con el apoyo incesante en las gradas y un partido jugado a muerte Huachipato lo dio vuelta, y en los penales infartantes Nery Veloso se lució, dejando el disparo de campeonato al histórico Omar Merlo.
Tu mayor alegría o tristeza relacionada con la actividad deportiva: La Mayor pena fue vivir de tan cerca el accidente ocurrido a los hinchas de O’Higgins que tras el partido contra Huachipato, en un paseo a Tomé perdieron la vida. Eso caló hondo en el hincha acerero, recuerdo el minuto de silencio que hicieron en el estadio, en el primer encuentro con O’ Higgins tras el accidente. Fue de silencio absoluto, y casi al terminar hinchas celestes gritaron con fuerza “Gracias Huachipato” a lo que la barra respondió con un grito en favor de O’Higgins. El partido en sí quedó de lado, en un ambiente de unidad que traspasó lo deportivo.
¿Te hubiese gustado dedicarte a alguna disciplina? Si es así, ¿A cuál? Cuando joven, siempre quiere ser futbolista. El talento no me acompañó mucho, en el tenis tampoco, pero claro hubiese sido entrete ser un gran jugador y sacar campeón hasta de la Copa Libertadores a Huachipato.
¿Qué deportista te habría gustado ser o admiras? Al ser tan futbolero, me hubiese gustado tener el talento y la alegría de Ronaldinho, tremenda magia en la cancha y siempre sonriendo, disfrutando lo que hacía, como debe ser en todos los ámbitos.
¿Practicas algún deporte hoy en día? Soy pinchanguero oficial, con vecinos, amigos nunca me falta su partido. Antes era más seguido cuando teníamos un buen equipo en la Bodeguita. Le ganamos a casi todos los bares, hasta que uno se galleteó (sic) y llevó nuestra moral a 0 con tremenda goleada que nos hicieron. Volvimos a la chicha.
¿Qué falta para que el deporte crezca más en Chile? En Chile como muchas cosas se hacen a medias o mal, y el deporte no pierde pisada, centrándose en el fútbol es preocupante que actualmente sea algo más mercantil y de buenos contactos que privilegiar un nuevo talento, donde la S.A solo están en clubes para tratar de generar “un buen negocio”, olvidando también los intereses de los hinchas. Para que crezca realmente, la formación debe ser completa e integral, con tal de formar jugadores con capacidad, pero completando su ciclo de preparación y harta experiencia. Sucede que ahora levantan jugadores que sobresalen algo e inmediatamente buscan el negocio, y no dejando que maduren, esto provoca el fracaso, descontento…..Es difícil para cualquiera estar solo en otro país mucho más competitivo, imagínate para un adolescente.
En escenarios como el de hoy, de incertidumbre económica, al momento de redistribuir recursos las áreas del arte y el deporte por lo general siempre las primeras en sufrir recortes. ¿Qué piensas de esto, y cómo se podría cambiar esta realidad que se arrastra por muchos años? Deberían cautelar recursos no solo en desarrollo de nuevos atletas de competencia para nuestro país, sino campañas completas para motivar a realizar deportes. De ese modo crece el interés y así disminuyen un montón de enfermedades. En concreto, si invierten en deporte, tendrán menos gasto público. En lo que se refiero al arte y me compete, los recursos son escasos y entregados mediante concursos públicos, con un sistema arcaico, poco efectivo, con pitutos y generan competencias más que crecimientos. Nadie mide resultados concretos, solo analizan rendiciones de gastos. Los recursos deberían ser entregados con méritos en modo de aceleramiento. En nuestro caso contamos con un sello y booking que trabaja, por ejemplo, con Vibración Eleva. Ellos han logrado un nombre, pero para triunfar y ser una fuente laboral íntegra, requieren el último empuje económico. ¿Por qué no, podría ser el Estado?