Opinión

Naval: una torta, 75 velas y los invitados sin entrar

El "Ancla" estuvo de aniversario, justo en los días en que recibió una buena noticia judicial y espera que la Anfp no haga oídos sordos. El cuadro chorero podría salir de un larguísimo silencio para meter ruido este fin de semana.

Por: Paulo Inostroza 20 de Mayo 2019
Fotografía: CDS Naval

Hace exactamente 70 años, Naval derrotó a Caupolicán y se quedó con el primer Campeonato Regional. El mismo que ganó 8 veces. Cinco años antes se fundó el, por entonces, único equipo de Talcahuano. Pasaron “Chancharra” Leal, el “Pinga” Bravo, “Soquete” González y, mucho más adelante, “Jurel” Herrera. Imposible ser ídolo del club sin tener un buen apodo.

Llenaban El Morro, con y sin Pelé. En los ‘90, costaba un mundo ganarle con el viento en contra, llegaron a tener 5 jugadores compartiendo en una misma nómina de la selección chilena. Mucho antes, Naval y algunos refuerzos representaron a Chile en los Juegos Olímpicos. Historia que inunda y desborda el puerto por todos lados.

Y este es el aniversario más extraño de todos. Uno que lo encuentra sin jugar y sin saber cuándo lo hará. Y así van 17 meses que se han hecho larguísimos, sobre todo, para ese hincha antiguo que no va al estadio si no es para ver al equipo chorero, en la división que sea, con el presidente que sea y jugando mal o bien. El Morro es hace rato un lugar de encuentro, más que una cancha de fútbol. Y el navalino aprendió a cuidarse, porque las caras se repiten y se extrañan de domingo a domingo.

Dicen que debe volver la próxima fecha. Que la Anfp ya no puede hacerse la desentendida y que, si no, Gamadiel llevará el paro hasta el final. Dicen. Lo han dicho un montón de veces y siempre pasa algo. Van ocho fechas y la gente sigue esperando, con la mesa puesta. El plantel entrena, juega amistosos por si acaso y mal no se ven, aunque tendrán que jugar miércoles y domingo, viajar a Arica y nadie sabe si al tercer mes empezarán otra vez los problemas de caja. Son 75 años y ya no están Sen, Pillado ni Unzaga tirando chilenas. Hay arrugas y muchas ganas de vivir.

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