Nicole Carvallo C.
Economista
A raíz del octavo puesto que obtuvo Chile en el sistema de pensiones, en un estudio internacional, es imposible quedar indiferente ante este “auspicioso puesto”.
Sin querer analizar, en este momento, nuestro sistema de pensiones que merece un libro, me quiero volcar a la esencia de la economía. La ciencia económica es, ante todo, una ciencia social. Las estadísticas, cálculos y bases de datos nos son útiles para inferir y obtener resultados para interpretar la evolución y características de nuestra economía. De ahí la importancia de los datos: una herramienta útil para poder traspasar a todos cómo estamos y cómo se vislumbra la situación económica del país.
Lamentablemente, en los medios no estamos viendo un traspaso “amigable” y lúdico, sino más bien cifras y porcentajes que al 90% de los chilenos NO les interesa. Las mismas cifras nos muestran que el 50% de los habitantes de Chile tienen un ingreso familiar aproximadamente de $300.000 (y menos en muchos casos)… A la gran mayoría le importa si sube o no el precio de los alimentos, del transporte y de las cuentas básicas, no las estadísticas. Mucho menos importa un octavo puesto en sistema de pensiones a un jubilado que apenas alcanza para comprar sus remedios y con suerte algunas cosas para alimentación. Personalmente, me da vergüenza ese estudio lleno de carencias y carente de criterio y humanidad.
El crecimiento económico es importante para poder implementar políticas públicas que promuevan principalmente a los sectores más vulnerables y que otorgue acceso a satisfacer necesidades absolutamente básicas como salud, educación, seguridad, empleo, entre otras. Pero… el crecimiento y anhelado desarrollo es solamente una cifra sino se traspasa a las personas en cosas concretas que generen una mejor calidad de vida, que es lograr el equilibrio entre bienestar físico, emocional, social, familiar, y varios aspectos que no pasan solamente por lo económico, es un conjunto de factores que contribuyen a que las personas se desarrollen.
Mejorar la calidad de vida de un país es mejorar la calidad de vida de su gente, acortando la brecha de desigualdad y la falta de acceso a ítems que constituyen un derecho.
¿Informar con datos y porcentajes es un aporte? Usemos las estadísticas para sacar conclusiones que lleguen a todos. Finalmente, en un escenario de crecimiento en vías al desarrollo, ¿de qué forma se traspasa esto a la calidad de vida de los chilenos?
Podemos mostrar algoritmos y ecuaciones, pero sería ideal que todos supieran como les afecta en su vida cotidiana y en el futuro las políticas económicas. No olvidemos a las familias que día a día viven carencias. No olvidemos que la economía es sobre todo una ciencia social que busca el bienestar de las personas… no la deshumanicemos.