Un país sísmico como Chile vive de manera constante con la posibilidad de que ocurra un movimiento telúrico de altas proporciones. Esto mismo fue lo que pasó recién en la Región de Magallanes donde de manera inmediata se activaron los protocolos de prevención y emergencia, con una imagen que dio la vuelta al mundo: el excelente comportamiento de la población al tomar las rutas correspondientes hacia los sectores altos de Punta Arenas.

Todo lo anterior reflotó el avance en seguridad dimensionado tras el 27/F. En el caso local, surge otra vez el proyecto de instalación de sirenas que avisan sobre la llegada de un tsunami.

Se trata de un proyecto que lleva adelante el Ministerio de Obras Públicas (MOP), en conjunto con el Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres (Senapred), y que considera la instalación de 1.003 de bocinas entre las regiones del país. Solo en el Biobío se proyecta la instalación de 144 de éstas en comunas como Tomé, Coronel, Penco, Talcahuano, Lota y San Pedro de la Paz.La iniciativa contempla una inversión de US$94 millones y se espera su licitación.

En un contexto de alta sismicidad y constantes riesgos de eventos oceánicos, la falta de avances concretos ha encendido las alarmas en los municipios de la zona. Una de las municipalidades que ha manifestado su inquietud es Tomé, comuna que ha colaborado desde los primeros momentos con el levantamiento de información territorial para la instalación de las sirenas.

Sin embargo, la lentitud del proceso ha sido evidente. El alcalde, Ítalo Cáceres, expresó que “este es un proyecto que está próximo a cumplir un año y todavía está en una etapa inicial. Sabemos que tendrá una implementación de algunos años, pero este viernes nos dimos cuenta de cuán necesario es contar con esas sirenas, para alertar a nuestra gente, teniendo en cuenta además la naturaleza sísmica de nuestro país”.
Jaime Seguel, encargado de la Unidad de Gestión del Riesgo de Desastre del municipio de Coronel, agregó que “insistimos: la concreción del proyecto de fortalecimiento del sistema de alerta en Coronel no puede seguir esperando. Está en juego la seguridad de miles de personas”.
La naturaleza del territorio nacional, la experiencia del 27/F y lo acontecido en el extremo sur del país dan cuenta de la necesidad total para materializar el proyecto de las sirenas. Sobre todo en Biobío donde destaca una gran población y actividad comercial junto al mar.