¿Si hay un “Gas a precio Justo”, podría replicarse un “Combustible a Precio Justo”? La duda queda encima de la mesa.
Desde agosto seis líneas de taxis colectivos subirán sus pasajes en 100 pesos en la comuna de Concepción. Una medida que golpeará el bolsillo de pasajeros, pero, por otro lado, tiene que ver con el alza en el precio de la gasolina, que afecta a empresarios y conductores de este tipo de transporte público.
“Hoy si uno compara lo que ha subido la bencina, para que tenga sentido, las tarifas deberían subir al menos de aquí a fin de año unos $100 o $200 más. Un pasaje de taxi colectivo no puede estar en menos de $850, porque hay muchas variantes que esta actividad no cubre y que se vinculan con los temas laborales, previsionales, seguros, repuestos, reposición de vehículos, entre otros. Antes esta situación se podía sostener con un combustible más barato”, sostuvo a Diario Concepción, Marcelo Villalobos, secretario nacional de la Confederación de Taxis Colectivos de Chile y presidente de la Federación Gremial de Taxis Colectivos de la Región del Biobío.
A lo menos desde el 1 de agosto las líneas 2, 3, 5, 16, 27 y 33 son las que aumentarán su tarifa. El mismo dirigente de los colectiveros reafirmó que la constante alza de los combustibles tiene complicado a su sector, que ya decidió traspasar estos costos de operación a los usuarios. Lo anterior, en el entendido que ya no es posible mantener las tarifas en las condiciones que circundan su negocio, donde los costos de esta labor se relacionan directamente al combustible, la mantención del vehículo y la compra de repuestos.
Así, se configura una segunda alza en casi un año y desde el gremio anunciaron que enviarán una carta a la Comisión Nacional de Energía para que quienes se desempeñan en el rubro tengan una rebaja de $500 en el precio del combustible. Para enfrentar el alza de las bencinas, el parlamentario del Distrito 20, Félix González, dio a conocer una iniciativa de ley que permitiría a la Empresa Nacional del Petróleo (Enap) vender combustibles de manera directa a los consumidores, teniendo estaciones de servicio, para acceder al combustible con un menor costo. Sin embargo, en una iniciativa que, por lo visto, no tiene la venia del Gobierno.
Lamentablemente, el alza del combustible no se detiene y los que están al final de la cadena, los usuarios, son quienes, para variar, terminan pagando las alzas. ¿Si hay un “Gas a precio Justo”, podría replicarse un “Combustible a Precio Justo”? La duda queda encima de la mesa.