Avanzar en la coordinación entre diversas áreas para hacer más expeditos los procedimientos y modificar las causas de adoptabilidad ajustándose a los tiempos modernos son parte de los necesarios cambios.
Un nuevo paso para cambiar el sistema de adopción en Chile fue adoptado recientemente por el Senado, que respaldó proyecto que agiliza el proceso. La Cámara Alta ratificó así, por unanimidad, el avance de la iniciativa ingresada en el poder legislativo desde octubre de 2013 y que busca reformar la actual Ley de Adopción, vigente desde 1999.
La adopción es una figura legal mediante la cual una persona o una familia acoge a una niña o niño para brindar protección, cuidados y encargarse de todo lo que se necesita para el desarrollo y bienestar. El espíritu de la institución de la adopción está basado en el interés superior del niño o niña, quienes son sujetos plenos de derechos y por ende la norma legal está orientada en la necesidad de otorgar una familia al niño o niña que han sido vulnerados en este derecho esencial.
Al cierre de 2020, según los datos oficiales, cerca de 11 mil menores de edad, entre infantes y adolescentes, estaban separados de sus familias biológicas. Detalle: solo 180 calificaban para ser adoptados de manera permanente. Ello porque no todos los niños y las niñas que son separados de sus familias biológicas entran al proceso de adopciones. En tal caso, los y las menores pueden estar en una de estas clasificaciones: Quedan al cuidado de una residencia de menores; son recibidos por una familia de acogida de forma temporal y/o pasan a formar parte del grupo para la adopción. Ese mismo año de 2020 más de 500 matrimonios se postularon para el proceso de adopción y la decisión de que una niña o niño puedan o no ser adoptados recae en tribunales. El proceso busca agotar todas las opciones de reinserción con su familia biológica para entonces partir para el proceso de adopción.
Una vez que se cumple con todas las condiciones que establece la ley para adopciones en Chile –hay que hacer pruebas psicológicas, sociales y económicas– el proceso suele tomar entre 16 y 30 meses.
La revisión de la actual ley debería hacerse cargo de una serie de falencias que son señaladas por los especialistas del áreas y por los patrocinadores del proyecto. Avanzar en la coordinación entre diversas áreas para hacer más expeditos los procedimientos y modificar las causas de adoptabilidad ajustándose a los tiempos modernos son parte de los necesarios cambios.