Las películas no son solo entretención, también son instrumentos de arte que abordan complejas temáticas que nos acercan a realidades que muchas veces olvidamos.
El 29 de noviembre de 1974, mientras caminaban en dirección a los estudios de Chile Films, ubicados en la comuna de Providencia, la actriz, Carmen Bueno, y su pareja, el camarógrafo y cineasta, Jorge Müller, fueron secuestrados por agentes de la Dirección de Inteligencia Nacional (Dina). La noche anterior, habían asistido al estreno de la película “A la sombra del Sol”, de Silvio Caiozzi y Pablo Perelman. Esa fue la última vez que sus amigos y cercanos vieron a la pareja.
La mañana de la detención ambos fueron trasladados a los centros de detención y tortura de Villa Grimaldi y Cuatro Álamos. No obstante, en vísperas de navidad, su rastro se perdió hasta el día de hoy. Hay un documental, estrenado en 2016, llamado simplemente “29 de noviembre” que relata la particular historia de Bueno y Müller, quienes también fueron cercanos colaboradores de Patricio Guzmán, realizador de “La Batalla de Chile”
El secuestro y posterior desaparición de la actriz y el cineasta, dieron origen a la conmemoración del Día Nacional del Cine, con el objetivo de destacar, promover y relevar la producción nacional, así como facilitar su acceso a todos los públicos. Y como es tradicional, en varias regiones del país, esta jornada habrá proyecciones y eventos especiales. Biobío no será excepción.
De hecho, uno de las actividades más destacadas se realizará en el Teatro de la Universidad de Concepción, con la exhibición de “El tango del viudo y su espejo deformante”, la primera película del cineasta Raul Ruiz.
Se trata de una obra inconclusa, que la realizadora Valeria Sarmiento completó en base a apuntes del artista puertomontino, fallecido en agosto de 2011, en Paris.
Por ello, quizás, en este día vale la reflexión respecto a lo que significa el denominado séptimo arte, en particular, para nuestro país. Las películas, los documentales, no son solo entretención y producciones millonarias, igual son instrumentos de arte que abordan complejas temáticas que en ocasiones están tan cerca, que somos incapaces de ver. También nos acercan a realidades que parecían olvidadas en algún espacio de nuestra memoria, y es precisamente eso, preservar la memoria uno de los objetivos más nobles de este arte y la cultura en general. Un ejercicio, por lo demás, que siempre debería ser parte de nuestras vidas, sobre todo en tiempos de importantes definiciones.