Mejorar las condiciones del mercado del gas favorecerá a todo el país, ciudadanía, empresas e industrias.
El anuncio realizado por la Municipalidad de Chiguayante, de ingresar al mercado de la distribución de gas licuado, generó positivas reacciones en todo el país. De hecho, autoridades municipales de Hualpén y Tomé solicitan que Enap instale una planta de envasado de cilindros de gas en Hualpén. También la Asociación de Municipios Libres tomó cartas en el asunto y ayer presentó la iniciativa “Gas Popular” para poder ofrecer este producto a bajos precios. Según lo anunciado por la Municipalidad de Chiguayante, será posible lograr un ahorro entre 40 a 50 por ciento para el consumidor final.
Desde la estatal hay buena disposición en favorecer mayor competencia en ese mercado. “Si generamos un beneficio para los chilenos y chilenas siempre como Enap vamos a estar dispuestos, porque somos una empresa de energía. Hoy participamos en la cadena de gas en Linares y San Fernando, con trenes de envasado, pero si esto se requiere nosotros evidentemente pondríamos otros en distintas partes del país, por lo tanto, en ese sentido los alcaldes estuvieron muy interesados en ver cómo es el proceso”, aclaró el gerente general de Enap, Andrés Roccatagliata. Un acuerdo entre la estatal y los municipios se traduciría en una rebaja de 24 mil a 15 mil pesos en el precio del balón de 15 kilos, puesto que la iniciativa no tiene fines de lucro. Varios municipios del país se sumaron a la propuesta.
El precio del gas licuado vuelve al debate luego de las denuncias realizadas por la Fiscalía Nacional Económica (FNE). En un informe difundido hace poco más de un mes el organismo dejó en evidencia que el mercado del gas licuado y natural está muy concentrado en Chile. En tal escenario de concentración, en que pocas empresas participan además de la distribución mayorista y minorista. Ese escenario entrega incentivos para coordinación de precios y repartija de territorios entre tres compañías. El efecto fue revelado por la FNE: tres empresas aumentaron su margen anual de un 35% a un rango de entre 50% y 55% desde 2014 y que se ha traducido en un precio adicional de US$181 millones que fueron pagados por los consumidores finales.
Mejorar las condiciones del mercado del gas favorecerá a todo el país, ciudadanía, empresas e industrias.