Por la importancia de la agenda, por la presencia de autoridades y actores políticos, el encuentro que se realiza en Biobío puede alcanzar un nuevo peldaño en la consolidación de los gobiernos regionales.
El encuentro de los gobiernos regionales tiene muchos significados. Es la primera reunión en que se convoca a las autoridades elegidas en mayo para que se reúnan lejos de los tradicionales centros de poder del país. Si el foco de la agenda es la descentralización, nada más natural que el encuentro sea realizado en regiones.
El análisis de las políticas que deberían entregar mayores atribuciones a las autoridades, como también los procesos para fortalecer los territorios son parte de la pauta de conversaciones del evento. A la cumbre fueron invitados la candidata y los candidatos a la Presidencia de Chile y de esa forma la cita que se realiza en Biobío se convierte en una plataforma para escuchar las propuestas de presidenciables en materias de descentralización. A la vez, permite entregar a la y los postulantes las visiones, anhelos y propuestas de las autoridades regionales.
De hecho, las conclusiones del encuentro y las demandas de los gobiernos regionales serán entregadas a quienes aspiran a la Presidencia y también a la Convención Constitucional. En la misma línea, de los nombres que buscan competir en los comicios de noviembre se esperan opiniones y posturas claras sobre la descentralización de Chile, sobre la entrega de mayor poder a las regiones, sobre el rol y las atribuciones de los gobiernos regionales y de sus autoridades que fueron nombradas por la ciudadanía.
Todas estas materias son de vital importancia si el objetivo es entregar mayores poderes a las regiones, mientras sigue en tramitación el proyecto de ley para implementar adecuadamente ese proceso. En las próximas semanas la Sala del Senado debería pronunciarse sobre el proyecto de “Ley corta”, que fue aprobado en la Cámara baja y en la Comisión Mixta de la Cámara Alta. Los gobiernos regionales han trabajado en forma directa con el Ejecutivo para alcanzar acuerdos que entreguen mayor celeridad en la tramitación de la “Ley corta”. Todo con el objetivo de propiciar un adecuado trabajo de las nuevas autoridades regionales, por lo que se respaldó el fin del silencio administrativo en el traspaso de competencia, la posibilidad de que los gobernadores citen a los seremis, se determinaron plazos para la Contraloría y procedimientos de traspaso de competencias.
El encuentro que se realiza en Biobío, por la importancia de la agenda, por la participación de autoridades y actores políticos, puede materializar una nueva etapa en la consolidación de los gobiernos regionales.