En ese escenario, intensificado por la informalidad laboral y el desempleo, las organizaciones sociales son fundamentales en la construcción de vías alternativas de apoyo.
Las universidades de Concepción, de Chile, de Valparaíso, de Santiago, y de La Frontera realizaron el sondeo “Respuesta Comunitaria a la Pandemia Covid-19”, la cual fue aplicada mayoritariamente a mujeres entre 20 y 59 años, durante los meses de mayo y junio de 2020. Con el objetivo de visibilizar los esfuerzos de ciudadanos en torno a la crisis socio sanitaria, se analizaron 1.202 respuestas de todo el país, pero con mayor énfasis en las regiones Metropolitana y Valparaíso.
El estudio puso en evidencia la importancia de la organización social en tiempos complejos. De hecho, los efectos económicos derivados de la crisis sanitaria multiplicaron la importancia de la organización social, que suelen actuar como primera instancia de soporte para las personas y familias en situación de vulnerabilidad. Eso probablemente explicaría que el 87% de los encuestados dijo participar de algún tipo de organización comunitaria. A través de redes sociales o plataformas de videoconferencia, los ciudadanos se asocian para hacer frente a necesidades de apoyo mutuo, solidaridad, acceso a alimentación, y también para impulsar las relaciones comunitarias. El informe elaborado por las casas de estudio destaca que un número importante de organizaciones se activaron desde el inicio de la pandemia, fortaleciendo el tejido social y la colaboración ante la inequidad y vulnerabilidad en muchas comunidades del país. La pandemia ha destapado problemas graves de carácter social arrastrados desde hace décadas, principalmente en ámbitos como el acceso a salud, alimento, trabajo, o vivienda. En ese escenario, intensificado por la informalidad laboral y el desempleo, las organizaciones sociales son fundamentales en la construcción de vías alternativas de apoyo. El estudio reveló que en las comunidades más vulnerables las respuestas a la actual crisis partieron desde lo comunitario, “desde abajo hacia arriba”.
Un análisis más detallado y comprensivo del sondeo se espera en un segundo informe que será trabajado de igual manera por la UdeC y las otras casas de estudios. Lo realizado, sin embargo, entrega una buena visión sobre las organizaciones sociales que aportan en soluciones cercanas, desde acompañamiento psicológico, prevención de violencia de género, asesoramiento legal, asistencia cultural y un sinfín de roles que van bastante más allá de las “ollas comunes”.