La empresa Latam abrirá el servicio a partir del 2 de julio. El Biobío destaca por un amplio número de trabajadores que se desempeñan en la zona norte del país, principalmente en actividad minera.
Tres viajes a la semana tendrán como recorrido las rutas Concepción – Calama y Calama – Concepción, sin detenciones. A partir del 2 de julio, la aerolínea Latam entregará un servicio que reduce significativamente el tiempo de viaje de 4 horas aproximadamente, a tan solo 2 horas y media.
María Paz Villasante, gerente de Estrategia Comercial de Latam Airlines Group, destacó que “esta ruta viene a satisfacer tanto a una importante demanda vinculada a actividades laborales como a un creciente número de pasajeros interesados por el turismo nacional. Nuestras estimaciones son que, para los primeros seis meses de operación, lograremos conectar cerca de 22 mil pasajeros”.
Lunes, martes y domingo serán los días de despegue de los aviones Airbus 320, con capacidad para 174 pasajeros, desde el aeropuerto Carriel Sur de Talcahuano. Por otro lado, desde la ciudad nortina volarán los miércoles, jueves y viernes. Los precios partirán en $29.990 por tramo, más tasas de embarque.
En ese sentido, Luis Méndez, director del Observatorio Laboral Sence Biobío, dio cuenta del beneficio de esta nueva posibilidad de traslado, ya que la Región posee una importante cantidad de personas que que ejercen labores en otros puntos del país, donde el Norte tiene gran protagonismo.
“Este tema lo hemos estudiado desde hace tiempo. En la jerga de la economía laboral, le llamamos “conmutación laboral”, que es el fenómeno de las personas que viven en una región y trabajan en otra. Este suceso en la Región del Biobío ha sido muy importante y, aunque disminuyó un poco producto de la pandemia, se ha ido recuperando últimamente. Antes, alrededor de 35 mil personas vivían acá pero trabajaban fuera”, explicó.
Si bien no conocen la cifra exacta, Méndez advirtió que actualmente serían cerca de 30 mil los habitantes de Concepción y otras comunas del Biobío que están contratadas en otras regiones, ya sea en Ñuble, Metropolitana o el norte de Chile.
Para estos últimos, los vuelos directos tienen “una importancia muy grande porque, en el fondo, son personas que traen recursos y que los gastan en la zona. Que haya ahora además un sistema local de viajes en avión es muy beneficioso para la economía local, debido a que va a significar una mayor integración de la economía del Biobío con las regiones mineras”.
Andrés Vásquez es topógrafo y, pese a que actualmente se desempeña en Lebu, trabajó por años realizando el viaje Concepción – Calama, ida y vuelta. El profesional penquista valoró que una ruta sin escalas “es muy buena para no depender de Santiago, ya que incluso para viajar dependemos de la capital”.
“De esa forma nos descentralizamos cada vez más. A la vez, los tiempos de viaje se reducen, ayudando a aprovechar la familia que tanto se extraña cuando uno está trabajando en las faenas mineras. Serán mejor aprovechados los momentos en familia”, agregó.