La autoridad salió al paso de las inquietudes expuestas por la Multigremial Bío Bío, quienes pidieron un plan de acción. Ante ello, resaltó que en el 2019 se invirtieron $8.100 millones ante este problema.
El seremi de Agricultura, Francisco Lagos, asegura que los efectos del cambio climático no pueden dejarnos indiferentes y que no hay dudas de que la sequía prolongada generar efectos negativos, pero que pese a que, por ejemplo, el año 2019 se cerró con un 30% menos de lluvias, la agricultura se desarrolló “sin grandes problemas”. Sin embargo, la Multigremial Bío Bío, a través de su vicepresidente, José Miguel Stegmeier, quien a su vez es presidente de Socabío, están preocupados, porque, a juicio de sus integrantes, urgen medidas urgentes como más embalses, mejor aprovechamiento de las aguas y mayor tecnificación. Ante esto, la autoridad salió a responder.
– Ante el déficit hídrico que alcanzaría un 45% en relación al promedio histórico, ¿hay preocupación también en el Gobierno Regional al respecto?
– Por cierto que los efectos que el cambio climático está generando en Chile y el mundo no pueden dejar a nadie indiferente, en el caso de la agricultura chilena, manifestado en una prolongada sequía, también, tiene un impacto que nos preocupa y de lo cual nos hemos ocupado como Gobierno y particularmente como Ministerio de Agricultura, al destinar tanto a través de la CNR, Indap y el Gobierno Regional importantes recursos para financiar obras de riego, que permiten a los agricultores usar más eficientemente el recurso. Las estadísticas de las precipitaciones en nuestra región dan cuenta que en el año 2019 finalizamos con un déficit de precipitaciones de alrededor del 30% respecto al año 2018 y, a pesar de ello, se pudo llevar a cabo sin grandes problemas la actividad agrícola. Este 2020 muestra un mejor escenario si se compara con la misma fecha del 2019, donde se observa una acumulación de precipitaciones levemente superior y con una mejor distribución. Sin embargo, esto no es un indicador que de certeza respecto de cómo se va a comportar el año en materia de precipitaciones, ya que se deben considerar las precipitaciones acumuladas de otoño, invierno, además de la acumulación de nieve.
– Sobre eventuales medidas que podrían realizarse, como lo son más embalses, el mejor aprovechamiento de las aguas disponibles en la Región y una mayor tecnificación al respecto. ¿Materias en el corto, mediano y largo plazo sobre ello?
– La Región del Bío Bío cuenta con un importante afluente, que es el río Bío Bío y también con el lago Laja, nuestro acumulador natural. El Ministerio de Agricultura, tal como ya lo señalé anteriormente, a través de la Comisión Nacional de Riego (CNR) y el Instituto de Desarrollo Agropecuario (Indap), han impulsado la tecnificación del riego y el mejoramiento de la infraestructura de conducción, con lo cual se ha logrado una mayor eficiencia del uso del agua; medidas que ayudan a mitigar los efectos del cambio climático. El año 2019 la Región capturó más de $ 8.100 millones de pesos en proyectos concursados a fondos de la Ley de Riego 18.450 de la Comisión Nacional de Riego y su materialización significó un directo beneficio para los agricultores al permitirles mitigar el déficit hídrico, a través de la conducción más segura del recurso y su uso más eficiente al implementar sistemas tecnificados de riego, muchos de estos últimos asociados a sistemas de generación de energía fotovoltaica que ha significado importantes ahorros, especialmente para pequeños agricultores. Debemos destacar que el año 2019 la Región del Bío Bío obtuvo un 48% más de recursos de la ley 18.450 que en el año 2018. Otra técnica que se está estudiando y analizando es la recarga de acuíferos, lo que requiere, en primer lugar, lograr establecer o identificar estos acuíferos, los cuales por diferentes técnicas posteriormente pueden ser recargados de modo que se transformen en acumuladores subterráneos que pueden ser utilizados para fines de producción agrícola.
– El vicepresidente de la Multigremial, José Miguel Stegmeier, a su vez, presidente de Socabío, pidió establecer una Junta de Vigilancia efectiva, por ende, consulto: ¿cómo la Seremi está trabajando con el sector empresarial en esta materia?
– La junta de vigilancia, en un organismo reconocido en el Código de Aguas como la instancia que permite a los usuarios organizarse y, a través de esta, lograr una adecuada administración del recurso. El Ministerio de Agricultura, a través de la Comisión Nacional de Riego, apoya a las organizaciones de usuarios del agua de un determinado río o cauce para, donde no existe, constituir su Junta de Vigilancia. Estas tienen por finalidad administrar y distribuir las aguas a las que tienen derecho sus miembros en los cauces naturales; explotar y conservar las obras de aprovechamiento común, y realizar los demás fines que les encomienden la ley y sus estatutos.
Particularmente en Bío Bío, la Seremi de Agricultura está apoyando y participando en el proceso de conformación de la Junta de Vigilancia del río Bío Bío y del Sistema Laja.
– Por último, la Multigremial, igualmente, solicitó dejar de lado la idea de enviar aguas regionales hacia otras latitudes. Esto teniendo en cuenta que hay proyectos que buscan aquello. ¿Qué le parece esta petición?
– Es del todo razonable que, ante un escenario de incertidumbre en la disponibilidad de agua como también frente a la información que circula respecto de proyectos que contemplan llevar agua desde la zona sur a la zona centro norte del país, los agricultores muestren inquietud. Sin embargo, no debemos olvidar que se trata de proyectos de privados de largo plazo para determinar si resultan de interés público y cumplen con los requisitos y normativas legales vigentes. El Estado tiene los procedimientos y organismos encargados de esos estudios y evaluaciones, pero además, se debe considerar que existe la normativa legal que garantiza los derechos de aprovechamiento de aguas que tienen los agricultores.