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Del sillón al tatami en un viaje que le cambió la vida

De ser un sedentario incorregible, pasó a ser un enamorado del deporte una vez que se encontró con el taekwondo. A partir de esta disciplina, se abrió a la actividad física y hoy practica todo lo que le pongan por delante. Como alumno de la Universidad Santa María, se quedó con el título regional de Adesup en la temporada pasada, logro que espera repetir este año, ahora convertido en un eximio practicante del arte marcial. Un 2023 donde su gran meta es ir a pelear los podios al nacional universitario.

Por: Samuel Esparza 13 de Marzo 2023
Fotografía: Cedida

Si hay un ejemplo de que el deporte cambia vidas, ese es el de Felipe Fernández (25), joven alumno de la USM, quien experimentó una transformación sustancial desde que se encontró con el taekwondo.

Una disciplina en la que comenzó ya entrado en edad, a fines de 2018, pero que trastocó lo que era hasta ese entonces su vida como estudiante, alejada de cualquier actividad física. “Es raro, pero antes no me gustaba ningún tipo de deporte, ni siquiera el fútbol. Era una persona súper sedentaria, tenía un sobrepeso de casi 20 kilos, así es que literalmente el deporte me cambió la vida”, reconoce.

Alumno de segundo año de Ingeniería en Gestión Industrial en la Universidad Santa María, el coronelino partió su carrera deportiva en la prestigiosa academia Golden Team , de Juan Pablo Contreras, hermano de la medallista panamericana, Yeny Contreras.

“Él me enseñó lo que es el taekwondo y me llevó al grado que ostento actualmente, que es el cinturón verde punta azul”, resalta el deportista, quien explica los motivos que lo llevaron a inclinarse por la especialidad.

“Me pareció interesante desde un comienzo, un deporte que formaba el carácter y ayudaba a centrarse en la vida. Eso fue lo que más me sedujo del taekwondo. Además que se me dio fácil, tenía las condiciones sumado al hecho de que al ser un deporte de contacto, me entregaba una adrenalina única que jamás había sentido, una sensación de estar alerta siempre”, detalla.

Cambio de hábito

Felipe dice que, a partir del taekwondo, se abrió por completo al deporte. “Me motivé tanto que algo se despertó en mí, comencé a trotar, a ir al gimnasio, y me entusiasmé con todos los deportes, al punto que hoy hago de todo, me invitan y voy”, sostiene el deportista que este año bajará a la división -68 kilos.

Su desarrollo en la disciplina fue especialmente veloz, así es que no tardó en iniciarse en lo competitivo. “Pronto me empezaron a inscribir en competencias, así es que no tuve mucho tiempo de adaptación. En la universidad, la profesora Viviana de La Rosa me vio y me escogió de inmediato como seleccionado, pues se dio cuenta que estaba un poco más avanzado. Ella ha sido muy importante, me incentivó aún más para competir, me enseñó mucho acerca del combate deportivo”, agradece Fernández.

Pese a que la pandemia cortó intempestivamente su campaña competitiva, Felipe siguió entrenando por su cuenta y no tuvo inconvenientes para retornar en plena forma a los tatamis con la vuelta a la presencialidad. “La última vez que había competido era principiante, pero cuando volvimos ya tenía otro nivel. Y lo demostré en mi debut en Adesup, el año pasado, cuando gané por nocaut a los 10 segundos en mi primer combate. Con eso me llené de confianza y seguí avanzando hasta que finalmente gané el título regional en mi categoría. Lamentablemente no se hizo el nacional y me quedé con las ganas de ir”, relata.

Una cuenta pendiente que espera saldar durante esta temporada en el torneo universitario, que comenzará en abril con las dos primeras fechas. “Este año quiero reeditar el título regional de Adesup, ahora en la división -68 kilos, y por fin ir al nacional a pelear el campeonato. Es una muy linda experiencia competir en Adesup, pero ojalá haya más apoyo. El año pasado hubo otro nacional, pero no pudimos ir por un tema monetario, pese a que nuestra selección de taekwondo es la que viene teniendo mejores resultados en la universidad”, recalca.

Sobre sus planes, Felipe señala que quiere seguir escalando en el deporte, porque para él ya no hay vuelta atrás en su vínculo con la actividad física. “Quiero terminar mi carrera y a la par, sacar el cinturón negro. Lo importante es seguir moviéndose, hacer deporte porque ayuda en todos los ámbitos de la vida”.

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