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¿Se confía o le cree más a un técnico extranjero en Chile?

Daniel Nejamkin, DT argentino, lideró a la selección que acaba de titularse campeona sudamericana de vóleibol masculino. Se suma a otros head coach y entrenadores foráneos que han cosechado éxitos, como Bienvenido Front (remo), Sergio Vigil (hockey césped) y Pablo Lemoine (rugby), pero también hay experiencias negativas, como el proceso que realizó el trasandino Cristian Santander en el básquetbol varones adulto. ¿Un atleta, de entrada, tiene un mayor respeto por el que viene de afuera? ¿Cómo es la consideración de los dirigentes respecto a los técnicos nacionales vs los extranjeros? Voces de diferentes disciplinas dieron su visión.

Por: Ricardo Cárcamo 03 de Octubre 2022
Fotografía: Diseño

Por Ricardo Cárcamo y Christopher Cortez

El reciente título sudamericano que obtuvo la selección adulta de vóleibol masculina, que venció 3-2 en una emocionante final disputada en el Gran Arena Monticello, suma otro logro a una actualidad del deporte chileno donde los éxitos se han repetido en varias disciplinas. Las históricas clasificaciones a mundiales adultos en el hockey césped (damas y varones) y en el rugby masculino son otros de los hitos recientes, en procesos donde hay un factor común: quienes están a la cabeza son extranjeros, ya sea como head coach o entrenadores.

El argentino Daniel Nejamkin lideró a la selección de voley a la cima sudamericana, mientras que en el hockey el también trasandino Sergio Vigil lleva un proceso de años. En el rugby, el uruguayo Pablo Lemoine condujo a la selección al Mundial de Francia, y aunque ya no está en el balonmano el español Mateo Garralda fue artífice de una seguidilla de siete clasificaciones consecutivas a copas del mundo.

En ese panorama, una de las apuestas que no resultó fue la del argentino Cristian Santander en el básquetbol. La selección adulta masculina quedó fuera en la primera ronda del proceso clasificatorio al Mundial de Filipinas, Indonesia y Japón que se disputará el próximo año, resultado que se produjo principalmente tras perder con Colombia un partido que tenía casi ganado. Luego, la federación determinó finalizar su vínculo y aún no se define a su sucesor, más allá que en series formativas sí hay nuevos nombres, como Gianluca Pozo, DT nacional que asumió en la Sub 23 masculina.

Con un escenario donde los entrenadores extranjeros tienen una alta influencia, bien vale preguntarse a qué se debe esto. ¿Se valoran distinto en relación a los nacionales, o en muchos casos tienen una mayor capacidad o trayectoria? ¿Se da porque el deportista chileno le cree o confía más en un foráneo? ¿A nivel dirigencial existe una visión distinta? Voces ligadas a varias disciplinas y funciones dieron su diagnóstico.

Más oportunidades

En 2017, Galo Lara condujo a la selección chilena Sub 17 masculina de básquetbol a un histórico título sudamericano. Hoy, es el head coach de Stadio Italiano en la Liga Nacional y fundó Trasandino Basket de Los Andes, institución que tiene fines formativos. Desde su perspectiva, en el país se confía más, de entrada, en técnicos extranjeros que en nacionales.

“Creo que ocurre así, en una gran mayoría. Pero en mi caso, me pasó todo lo contrario, pues al haber sido jugador, conocido en el país, seleccionado chileno no me costó eso. Los chicos me respetaban de entrada y fue una buena experiencia. El respeto se gana cuando tus jugadores te creen y adherir a tu manera de trabajar, pero esto igual está ligado a la carrera del técnico. Por eso, cuando jugaste ya existe un cierto respeto, la gente te conoce. Pero eso de confiar más en un extranjero al comienzo no sólo se asocia a los jugadores, también tiene que ver con lo dirigencial. Siento, y es bien conocido por muchos DT nacionales, que los dirigentes y en general el mundo deportivo le ‘compra’ más a los proyectos argentinos o de otro lado, pues han tenido más resultados en algunos procesos”, expresó el técnico.

Sobre si a igualdad de currículum y logros se opta por un extranjero sobre un nacional, Lara aseguró que “muchas veces sí, y son pocas las oportunidades que se le dan a los nacionales. Hay muchos que realmente están capacitados y pueden asumir roles importantes en cualquier proceso selectivo y también a nivel de clubes, de instituciones deportivas”. En cuanto a la entrega de recursos o condiciones para desarrollar un proyecto, indicó que “el entrenador que sea, chileno o extranjero, llegará con un plan de trabajo, lo que quiere hacer, objetivos, y de ahí proyectará una planificación a corto o mediano plazo. Obviamente, si viene alguien del extranjero los dirigentes le tratarán de conseguir lo que pida para que desarrolle su gestión”.

Tras la salida de Cristian Santander, ¿su sucesor debería ser chileno? Lara afirmó que “es para analizarlo. Debería tomar un mayor protagonismo el entrenador chileno, de todas maneras. Conocen el medio, la idiosincrasia y creo que eso es un punto a favor. Sin desmerecer la labor de los técnicos de afuera, pues hay muchos muy buenos pero también hay otros que no lo son tanto y no tienen las capacidades para asumir ciertos desafíos. Eso mismo pasa con los chilenos, pues hay algunos muy bien preparados y otros que no, y por eso a veces se recurre a personas extranjeras…Además, a los clubes muchas veces les resulta más económico traer entrenadores extranjeros a desarrollar tareas de jefes técnicos”.

Más ambición

El argentino Jorge Facchini es hace varios años jefe de la rama de vóleibol del Deportivo Alemán. “Chile es un país ordenado, especialmente en lo económico, lo que lo hace estable. Esa es la mejor condición que ofrece. No va de crisis en crisis como Argentina, por lo que es atractivo. Como lo económico es una variable fuerte, hay buena infraestructura de gimnasios tanto privados como públicos y calidad de material deportivo. Está la genética y la proyección, tanto de norte a sur hay deportistas con potencial. Lo que sí creo que es deficiente es la estructura organizativa, especialmente a nivel asociaciones y federaciones. Es muy limitado en cantidad y calidad. Creo que falta experiencia y desarrollo profesional”.

En ese diagnóstico, agregó que “Chile hoy ha evolucionado mucho deportivamente, pero el paso siguiente tiene que darlo a nivel de estructura: ser menos burocrática y más expedita, con una visión de planificación constante. Debe haber una visión de hacia dónde va el deporte. Por ejemplo, yo creo que este boom del voley masculino debe ser aprovechado. El voley federado va por un lado, el universitario va por otro, el escolar por el suyo; el deporte no se compatibiliza con la educación, y todo esto limita con la planificación, proyección y evolución del deporte (…) Personalmente soy un agradecido del país y de Concepción porque me han brindado las facilidades para desarrollarme, pero uno siempre en esta pasión quiere ir por más”.

Consultado sobre su visión de los entrenadores nacionales, afirmó que “he visto buenos técnicos. Lo que les falta es más pasión y hambre. El respeto existe, lo que sí creo es que se gana con el ejemplo. Un entrenador tiene capacidad de trabajo, pasión e información, hace que sea deseado para practicar con él. Los primeros que te otorgan respeto son los propios deportistas”.

En esa línea, agregó que “creo que en Chile son muy respetuosos los jugadores y dirigentes, pero la gente no: especialmente con los extranjeros son muy chaqueteros, como se dice acá. En ese ámbito he sufrido faltas de respeto, pero lo tengo muy claro. Se relacionan con hablar de lo que no se sabe, hasta también diría que tiene que ver con el aspiracionismo, y eso se llama envidia”.

Gualberto Mesa, entrenador cubano de canotaje, también contó su experiencia en Chile. “Llegué a San Pedro y las condiciones en el canotaje eran menos que mínimas. No había embarcaciones, no había remos, no había gimnasio, era todo muy complejo. La zona nuestra es muy compleja por su clima, lo que es peor todavía. Desde ahí hemos ido avanzando con el paso de los años. Después de 15 años estamos construyendo un gimnasio de nivel que realmente es necesario para los atletas y hemos tenido resultados igual. Eso ha sido gratificante”.

Respecto a si se prefiere a un técnico extranjero por sobre uno nacional a igualdad de condiciones, Mesa comentó que “no, yo no lo he percibido de esa manera. Lo que define a un entrenador son sus resultados, sea el deporte que sea, eso es lo que prima”.

¿Lo de afuera es mejor?

Alexi Ponce, psicólogo deportivo y director de Go Focus, indicó que “siempre pasa algo de eso, de que se piense que lo de afuera es mejor, de la valoración de algo que uno no conoce, que viene de un país donde hay más tradición deportiva, evidentemente eso ayuda y favorece a quien proviene de ese lugar”.

Ponce, consultado sobre si para un dirigente traer alguien de afuera puede significar un salto de calidad, independiente que un DT nacional tenga similares logros, aseguró que “evidentemente, muchas veces alguien que viene de afuera, con dedicación absoluta, se le entregan más posibilidades y la dirigencia puede sentir que está ayudando al crecimiento trayendo gente con experiencia de otros países, de otros lugares”.
En ese sentido, añadió que “en general hay una tendencia especialmente en las áreas profesionales de que lo de afuera es mejor. Pero si el trabajo no lo demuestra, si el día a día no le da las opciones, eso se desmitifica o se cae rápidamente”.

¿Hay desde el deportista un respeto mayor de entrada si es alguien extranjero? “Puede ser que así ocurría antes, pero ahora se está dando un giro. El deportista valora el trabajo, el profesionalismo, la mirada técnica y también el compromiso que se tenga en pos de un objetivo. Y si cumplen esas condiciones, puede ser extranjero o chileno. Esa ‘facilidad’ que pudiera tener un técnico foráneo cada día se va matizando más por las capacidades técnicas y los resultados finalmente”, afirmó el psicólogo.

Además, Ponce destacó que en el mundo globalizado actual es posible tanto conocer detalladamente los antecedentes de un extranjero que llega al país como acceder a una mejor formación para los entrenadores chilenos.

“Cada federación, el Comité Olímpico intentan capacitar mejor a sus entrenadores, porque el mundo se abre. Hoy día la conexión, las redes sociales, muestran el trabajo, lugares. Todos sabemos quién es cualquier persona, su trayectoria, resultados. Las comunicaciones ayudan mucho en ese sentido”, señaló.

 

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