Deportes

El héroe inglés que ganó el Mundial de 2003 y no lo recuerda

Por: Samuel Esparza 10 de Diciembre 2020
Fotografía: CC- Taneroa

“No recuerdo haber ganado el Mundial. Puedo verme ahí saltando y celebrando. Pero no puedo recordarlo. Honestamente, no conozco el resultado de ninguno de los partidos. No recuerdo ni haber estado en Australia”, reconoció Steve Thompson, de 42 años, exjugador de la selección inglesa de rugby campeona del mundo en 2003 y que ahora contó su calvario al detalle en The Guardian.

El ex jugador de La Rosa, héroe de aquel Mundial, no recuerda nada. Ha sido diagnosticado de una demencia precoz y en su cabeza no hay registro de aquella gesta en Australia, donde Inglaterra rompió con la hegemonía de las superpotencias del hemisferio sur. Su caso no es el primero en el rugby.

“Sabiendo lo que sé ahora, desearía no haberme convertido nunca en profesional. Pasé de trabajar en una obra y entrenar dos veces a la semana a entrenar todos los días, a veces dos veces al día. Desearía haber terminado mi carrera antes, tal vez mi diagnóstico no hubiese sido tan sombrío”, dice amargamente.

Por eso, Thompson ha decido unirse a un grupo de ex jugadores profesionales, todos menores de 45 años, que demandarán a la World Rugby, la Rugby Football Union inglesa y la Welsh Rugby Union por lo que consideran una falta de protección ante los riesgos causados por las conmociones cerebrales. Entre ellos están Alix Popham, internacional con Gales, y Michael Lipman, también inglés pero que reside en Australia. “No quiero matar el juego. Lo quiero regulado. Cada año un automóvil tiene una inspección técnica. Con el cuerpo debería ser exactamente lo mismo. Suena horrible, porque quizás los muchachos van a tener que retirarse a los 22 o 23 años. Pero créanme, es mejor terminar así que estar donde estoy ahora”, reconoció.

“No quiero que el juego se detenga, pero todos los de arriba miran hacia abajo diciendo que el principal activo de este deporte son los jugadores. Tenemos que asegurarnos de tratarlos así. Los tratamos como trozos de carne que sólo tienen que entrenar y hacer lo que les decimos, y cuando no son buenos nos deshacemos de ellos, y eso es lo que pasa. Tratan a los jugadores como trozos de carne que sólo tienen que entrenar y hacer lo que les dicen”, continuó.

Steve comenzó a practicar rugby con 15 años y formó parte de la primera generación de jugadores profesionales en su país. Se ha marcado ahora como objetivo cambiar las reglas para evitar que quienes juegan hoy al rugby no tengan que pasar en el futuro por el calvario que está viviendo él.

El bufete de abogados británico Rylands Legal está en contacto con más de 100 ex jugadores como parte de la histórica demanda. Los ex jugadores también han lanzado una carta de 15 puntos de cambios que les gustaría que se introdujeran, a fin de proteger la seguridad de la próxima generación de profesionales.

Etiquetas