Cuando era chica practicaba tenis y hándbol, pero su madre le pidió que eligiera uno. Se quedó con el segundo, en gran parte por el modelo de su hermana Leonor. Asegura que el deporte le ha entregado cosas más allá de la cancha y quiere seguir practicándolo mucho tiempo más.
En la vida de Martina Devcic, el deporte siempre ha tenido un lugar importante. Si bien ahora esta alumna del Colegio Itahue, que este año cursará Cuarto Medio, está dedicada hoy 100% al balonmano, también contó que practicó gimnasia y tenis en años pasados. De hecho, en un momento su mamá la hizo optar entre el hándbol y la raqueta. “Se trataba de dos disciplinas totalmente distintas, y que necesitan de implementos diferentes. Además, si uno quiere ser realmente bueno en algo, debe dedicarle tiempo”, aseguró.
Y en esa decisión, la influencia de su hermana Leonor fue muy importante. De hecho, Martina reconoce que motivó su interés inicial en este deporte. “Fue seleccionada nacional, jugó mundiales y le apasionaba mucho, entonces ahí me empezó a gustar, gracias a ella y lo que veía que conseguía jugando. Empecé hace como cinco años, partí en mi colegio, pero como me gustó después pasé a forma parte de un club igual, Deportes Concepción”.
De su evolución, comentó que “los veranos, que es cuando entrenamos más, siento que avanzo mucho, pero en general progresando año a año. Igual, más allá de la parte técnica, busco seguir mejorando, lo que es un proceso que depende mucho de cada uno, de la motivación y el esfuerzo personal”.
Es la menor de tres hermanos, y se reconoce como la regalona de su casa. Contó que antes del estallido social entrenaba todos los días, entre su colegio y su club, y ahora mantiene haciendo deporte por su cuenta cuando no practica. Pese a ese intenso ritmo, no descuida sus estudios y terminó Tercero Medio con un excelente promedio.
“Me concentro harto en mis estudios, y considero al balonmano como una actividad muy importante, pero es un extra dentro de mi vida escolar. Las notas están sobre el deporte, pero creo que se pueden hacer bien las dos cosas perfectamente, rendir muy bien en ambos campos. Pasé con 6,8 a Cuarto Medio”, indicó.
Más allá que su agenda está siempre llena entre el deporte y sus deberes académicos, aseguró que se da el tiempo para hacer otras cosas. “Salgo harto con mis amigos, me gusta cocinar, toco piano de repente. Me gusta pasar mucho tiempo con mi familia también”, dijo.
Más que solo competir Martina contó que probó casi todas las posiciones de la cancha, y que actualmente juega como lateral o extremo, las que más le gustan. Sobre la pasada temporada de Adicpa, comentó que “en mi colegio hicimos un equipo súper improvisado, que al final nos resultó muy bien, pues salimos primeras. En la cancha logramos desenvolvernos y complementarnos súper bien, lo que se reflejó también en los resultados que obtuvimos. Y a nivel personal, en el resumen, creo que fue un muy buen año, más allá que por lo que ha pasado en los últimos meses no hemos podido entrenar con la misma regularidad de siempre”.
Del nivel general de este torneo escolar, aseguró que “siempre hemos sido un equipo que resalta, por lo general nos va bien, y a nivel más global creo que la competencia estuvo muy buena. Sabemos que en otras regiones también hay elencos muy potentes, y sería muy bueno que hubiese más instancias nacionales, para así poder probarnos”.
Además, Martina destacó que el deporte le ha traído muchos beneficios, más allá de los resultados o la competencia misma. “Primero que nada, salud. También muchas amistades, que son muy fuertes y las he mantenido a lo largo del tiempo. Sin el balonmano, no las hubiera conocido”.
Respecto a su futuro, comentó que aún no tiene claro lo que quiere estudiar cuando salga del colegio, pero sí le gustaría seguir practicando este deporte independiente de la carrera o institución por la que opte en la educación superior. “Aunque sé que este año uno estará full pensando en la PSU igual quiero encontrar los tiempos para entrenar. En la universidad, la mayoría tiene selecciones de hándbol, entonces ojalá poder entrar ahí, seguir y no dejarlo de lado, pues me gusta mucho”.
Al respecto, también se refirió a la posibilidad de conseguir una beca deportiva cuando ingrese a la universidad. “No sé si me la den, pues debes tener muy buen currículum deportivo para acceder a una, pero por supuesto me gustaría optar a una. No sé si estudiaré acá o no, estoy abierta a irme a Santiago por ejemplo en caso que sea necesario. Igual en este momento tampoco tengo claro qué carrera quiero, cero idea ahora (ríe). Pero me queda todo un año para decidir, así que estoy tranquila”.
Por otra parte, Martina se refirió al crecimiento que ha tenido el balonmano a nivel general en el país. “Ahora que Chile ha clasificado a mundiales y cosas así se le está mirando más. Ojalá que esto se mantenga y pueda ir más hacia arriba, pues es algo positivo para todos los que estamos ligados al deporte”.