Selección chilena Sub 17 clasificó al Mundial de Brasil, tal como lo hizo su antecesora, llegando a India 2017. Ambos equipos fueron ideados y dirigidos por Hernán Caputto. ¿Cómo trabaja el DT del momento? ¿Podemos ilusionarnos con un futuro mejor?
Ilustración Andrés Oreña P.
En algún momento, el mundo futbolístico fue tajante en afirmar que Chile no tenía recambio. En lo inmediato, está claro que así era, salvo un par de casos aislados. Pero en un horizonte más lejano, el trabajo de Hernán Caputto clasificando a la Sub 17 a dos mundiales consecutivos abre una luz de esperanza. Al parecer, material existe y quizás siempre existió. A eso, al fin se añade un aparente trabajo y planificación de fondo, algo que por años no existió de buena forma en nuestras series menores. ¿Qué pasó desde 2016 a la fecha? ¿Es un oasis o un cambio verdadero?
“El “Capu” es una gran persona, sencillo, y eso busca transmitir. Quiere que el jugador entienda lo que es defender la camiseta de su país, porque él siempre ha sido un apasionado por lo que hace”, cuenta Cristián Muñoz. El arquero de la UdeC compartió con Caputto en Huachipato, el año 2010, justo antes que el actual DT de la “Roja” se retirara. “Se transformó en un gran amigo. Solo uno podía jugar ese año, pero siempre fue un tremendo compañero y un tipo muy querido en el grupo”, destacó el “Tigre”.
La personalidad del ex portero es clave en el sello de sus selecciones. Muñoz advierte que “su gran preocupación es la formación valórica, porque estamos hablando de muchachos muy jóvenes. Para Hernán, el fútbol no es solo gambetear un par de rivales y pegarle bien a la pelota, él quiere un buen grupo, se preocupa de los chicos y de lo que vendrá después del torneo. Eso es clave, porque más allá de este buen resultado, hay que monitorear si los chicos juegan después en sus clubes, qué pasa con sus vidas y seguir trabajándolos para una Sub 20 y más arriba. No es clasificar por clasificar”.
Caputto llegó a la Sub 17 en abril de 2016, misma fecha en que Héctor Robles tomó la Sub 20, sin el mismo éxito, y Luis Ahumada asumió como jefe técnico de las series menores. Antes del “Choro”, hoy despedido, estuvieron Nicolás Córdova, Claudio Vivas y Mario Salas. Este último, el único que llevó a la selección a un Mundial. Lo de la Sub 17 era aún peor: en los últimos 9 Sudamericanos -antes de Caputto– Chile siempre terminó del sexto lugar hacia abajo. Y de estas últimas camadas, muy pocos llegaron a la “Roja” adulta para ser real alternativa de Aránguiz, Medel o Vidal. La palabra “Recambio” se transformó en un concepto maldito.
El “Tigre” revela que “Hernán se retiró en Huachipato. Concentrábamos juntos y jugaba a ser técnico, analizaba al rival de turno, trataba de adivinar qué haría el “profe”. En ese tiempo nos dirigía Arturo Salah, que tiene esa cosa tan formativa y que te habla mucho de fútbol, le gusta que estés preparado y tiene ese mismo sello que veo en Hernán. Arturo es uno de los cuatro mejores técnicos que tuve en mi vida, con Bianchi, Pekerman y Borghi. De ese nivel te estoy hablando”. Y fue justamente Salah, quien años más tarde –a la cabeza de la Anfp- confió en Caputto y lo puso al mando de la “Roja” Sub 17.
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El hincha empezó a identificarse con Caputto cuando lo vio cantar el himno chileno, desde el alma, en el Mundial de India. Fue 0-4 contra Inglaterra, pero la postal se hizo imborrable. Lo mismo que las palabras de sus dirigidos, contando que el técnico decidió pasar del tour habitual y llevarlos a conocer la pobreza de aquel país, repartir comida a la gente. Después sentó a sus muchachos y les hizo ver lo afortunados que son. Detalles que marcan. Ese equipo de 2017 no era tan talentoso como el de este 2019, pero tenía mucho de lo otro. Actitud de sobra.
En esa nómina había 21 chicos. Siete eran de provincia (dos de San Felipe, dos de Wanderers, uno de O”Higgins, Cobreloa e Iquique). En el sudamericano clasificatorio, citó otros 6 muchachos que no llegaron a India. Ahí había otro de Wanderers y los demás siempre de Santiago. En el último Sudamericano Sub 17, donde Chile acaba de ser subcampeón, Caputto llamó 23 jugadores y 8 de ellos eran de clubes de regiones. Colo Colo fue el que más aportó, con 7 elementos.
Uno de ellos pertenece a Huachipato: Joaquín Gutiérrez, de 17 años. El joven lateral derecho integra la serie acerera dirigida por Luis Peña, recordado ex volante del club. El “Huevo” señaló que “Caputto vino a Concepción y también lo vio jugar en Santiago. Hernán elige algunos jugadores de su gusto, les hace un seguimiento y trabaja constantemente con ese pequeño grupo. No es de esos procesos donde prueban 60 o 70 jugadores y de ahí va dejando los que andan mejor. Selecciona los precisos y hasta ahora le ha funcionado bien. Yo creo que acá en Huachipato, por ejemplo, había fácilmente un par de jugadores más que podría haber visto o probado. Bueno, es el gusto de cada entrenador”.
Peña jugó 8 años en el primer equipo de Huachipato, donde hizo dupla en el quite con “Chiqui” Chavarría, entre otros cracks. El ex volante precisó que “Caputto siempre ha optado un poco por jugadores de biotipo bien desarrollado físicamente, aunque en esta Sub 17 aparece un chico como Danilo Díaz (1,58 metros), que es muy bajito y una de sus figuras. Hay muy buen material y ojalá puedan seguir un proceso. Que no se pare esto de un Mundial a otro y existan microciclos para que sigan trabajando y desarrollando una idea. Está la gente para hacer algo bien interesante”.
¿Podemos ilusionarnos con un recambio? El “Huevo” es aterrizado y afirma que “a mí me gusta lo que está pasando, porque creo que se está volviendo al buen juego, a la intensidad que uno quiere ver en una selección. Ahora, estos chicos son muy jóvenes y hay que prepararlos bien para que lleguen porque no todos llegan. No me atrevería a decir que hay recambio, pero sí que se está haciendo un trabajo para buscarlo y debe ser constante. Vamos a ver qué sucede cuando estos jóvenes pasen a la Sub 20 y cómo se insertan después en sus clubes, que es la etapa más difícil”.
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Joaquín Gutiérrez es la única carta del Bío Bío que participó en este proceso con Caputto. En el anterior, no hubo ningún otro rostro local. En este momento, es alternativa en una escuadra titular que el técnico repite casi de memoria y que en el Sudamericano de Perú logró 17 puntos de 27 posibles, quedando solo por debajo de Argentina. Paraguay y Ecuador son los otros dos clasificados del continente al próximo Mundial de Brasil (del 2 al 24 de noviembre).
El lateral siderúrgico llegó este martes a la zona, a las 5 de la mañana. Poco habituado a las entrevistas, se mostró sorprendido ante tanta pregunta, pero contó de entrada cómo llegó a la selección. “Es difícil entrar a estos procesos cuando eres de provincia, porque no son tantos los partidos para verte. Imagino que, en mi caso, les gustó lo que hice cuando jugué en Santiago. No lo tengo muy claro, pero un día llamaron a Huachipato y me dijeron que tenía que ir a Santiago para entrenar con la selección. Eso fue en abril del año pasado y fue la primera práctica. Ese es más menos el tiempo que lleva trabajando este equipo”, advirtió. Según contó Peña, el mayor contacto de Caputto es con Juan José Luvera, jefe técnico del Fútbol Joven acerero.
Y Gutiérrez nunca salió del grupo de elegidos de Caputto. De hecho, Joaquín confirma lo señalado antes por su técnico, Luis Peña, y apunta que “en ese primer entrenamiento llegamos como 25 jugadores. En ese momento yo no conocía a nadie, pero de a poco fuimos armando un buen grupo que se ha mantenido en el tiempo. Son pocos los jugadores que han entrado y salido de las citaciones. Como que el “profe” siempre llama más menos a los mismos y eso ayuda a que todos nos vayamos conociendo mejor. En la cancha eso igual ayuda harto”.
Prefiere no hablar mucho de su técnico. “Nos dijeron que no habláramos de los profesores”, explica el lateral. De todas formas, detalló que “el “profe” es una muy buena persona y siempre está preocupado de todos nosotros. Es de conversar harto, de saber cómo estás. También es muy claro en lo futbolístico y eso es lo que se ve después en la cancha. Uno se siente cómodo. Jugamos más de diez partidos amistosos y eso nos hizo bien”.
Chile fue un equipo equilibrado en el Sudamericano: la segunda mejor ofensiva (17, solo superado por los 18 de Uruguay) y la mejor defensa (un gol por partido, igual que Perú). Dejó para la historia el 4-2 sobre los charrúas después de ir 0-2 abajo y figuras como Luis Rojas, Gonzalo Tapia, Alexander Aravena, Danilo Díaz y Vicente Pizarro. ¿Serán esos los chicos que mañana sucedan a Medel, Vidal y Alexis? ¿Qué pasará cuando pase a otras manos en la categoría Sub 20?
El “Tigre” Muñoz advirtió que “no se clasificó con dos equipos que jugaran muy parecido ni generaciones muy parecidas. Podría pensarse que hay que ir por una idea más común, pero lo importante es el fondo. Ambos grupos están siendo trabajados con una misma base valórica y de cómo sentir la selección. De ahí parte todo y creo que ‘Capu’ es la persona ideal para llevar este proceso. Estoy orgulloso de lo que ha hecho y se lo digo siempre, le mando mensajes. Él sigue con la humildad de siempre y tienen claro que hay mucho trabajo por hacer”. Y de un momento a otro, lo del “recambio” ya no suena tan maldito. Ojalá que, de esta buena base, pueda pararse otra gran casa.