Un poco de defensa, otro de dribling, pases, bandejas y tiros. Todo lo más básico, los fundamentos del básquetbol que, si se manejan bien, dan paso a un gran jugador. Ese fue el contenido de la Clínica de Básquetbol que esta semana llevó a cabo el plantel profesional de la Universidad de Concepción, en el Colegio San Agustín.
Alrededor 80 de alumnos de todas las edades participaron de la actividad, que forma parte del plan de la institución para acercar el deporte y hábitos saludables a los niños y jóvenes de la provincia.
Esta vez, el establecimiento educacional ubicado en pleno centro penquista fue el escogido para que jugadores y cuerpo técnico encabezado por el venezolano, Alfredo Madrid, compartieran con el alumnado. Entre juegos, dinámicas y mucho entusiasmo se desarrolló la jornada donde incluso se obsequiaron entradas para el encuentro de local de Basket Femenino UdeC vs Universitarios de Chile, que se realizó el sábado en Casa del Deporte.
Vicente Lermanda (14) cursa octavo año y pertenece a la selección de su colegio, donde hace de base o escolta. Sobre la visita, sostuvo que, “me parece excelente que hagan estas cosas. Todos conocemos a la UdeC, personalmente voy harto a ver sus partidos, así es que muy contento de tenerlos acá para que me enseñen algunos secretos de cómo ser un buen jugador”, manifestó.
Pedro Matus (16), de tercero medio, también es parte del combinado de básquetbol del San Agustín, donde destaca en el puesto de ala pívot. El alumno se mostró emocionado por la actividad, expresando que, “es espectacular que gente con tanta experiencia venga a enseñarnos sus conocimientos. Es primera vez que tengo la oportunidad de vivir algo así, por eso mismo espero sacarle el máximo provecho posible y darlo todo”, dijo.
Uno de los que se vio más animado con la instancia fue el pívot de Basket UdeC, Rodrigo Madera. El último fichaje del Campanil manifestó que, “para mí es una sensación única, porque cuando yo era chico en República Dominicana, también viví esta experiencia de que fueran a dar clínicas a mi colegio y veía a los jugadores como gigantes. Es algo que todavía tengo marcado y supongo que para estos chicos será algo similar, así que feliz de estar del otro lado. Además, que se da un entorno de mucha alegría, muy lúdico y eso a mí me encanta porque así ellos se sienten más cómodos”, subrayó.
El dominicano agregó que, “nosotros también salimos fortalecidos, no recargamos mucho de la energía de los niños, es una gran sensación y nos da alegría enseñar lo que hacemos, ver que aprenden. Quién sabe si de aquí sale algún nuevo deportista para Chile”.
Finalmente, Bárbara Barra, profesora de básquetbol del Colegio San Agustín, también resaltó la iniciativa. “Es una experiencia única para los chicos porque les permite motivarse, es algo que recordarán por siempre. También para mí, porque es mi primer año en el establecimiento. La idea es que ellos posteriormente apliquen lo aprendido y valoren y quieran este deporte para toda la vida”, precisó.