El destacado grabador e ilustrador penquista despliega, en Sala de Obra, esta celebración visual que muestra parte de su sobresaliente recorrido artístico. Estará montada hasta el próximo 30 de octubre con entrada liberada. En Tucapel esquina Barros Arana.
Por Rocío Avendaño / Mauricio Maldonado
Tras una extensa carrera artística en nuestra Región, y también fuera de ésta, hace unos días el ilustrador y grabador penquista Carlos Vergara Rivera inauguró “Retrospectiva de un imaginario distópico” en Sala de Obra (Tucapel esquina Barros Arana). Muestra que viene a celebrar sus 15 años de trayectoria, con una selección de sus más significativos y destacados trabajos visuales.
Así las piezas presentadas en esta exposición, tienen como temática en común la distopia tecnológica y ambiental, inspiradas principalmente en la mirada futurística que Vergara tenía durante su infancia, así como también en las promesas que vividas durante el cambio de milenio. No obstante, con el paso del tiempo su arte fue evolucionando, centrado su mirada en una distopía futura, con grabados de personas con máscaras y grandes trajes, mirando más allá de la época actual “Mí trabajo tiene una mirada más crítica de la sociedad del presente respecto a lo que puede venir a futuro. De una sociedad más difícil, dura y contaminada”, expresó el artista visual en conversación con Diario Concepción.
Durante estos años de camino artístico, el dibujante local ha tenido varias oportunidades de mostrar sus obras fuera de Chile. Es así que en el 2012 trabajó en la caratula del disco de la banda de rock experimental holandesa The Gathering, y tiempo después fue seleccionado en un catálogo internacional de ilustración perteneciente a una editorial de Corea del Sur. A nivel regional también ha sido reconocido con el premio Ceres en el año 2016 por sus ilustraciones de xilográficas en el cuento infantil “El planeta de los botones”, del escritor local Michael Loyola. A pesar de su exitosa carrera, Vergara ha decidido permanecer en Concepción, ya que tal como lo explicó, “pienso que no podemos estar siempre mirando para afuera y generando este punto de migración para que la gente lo conozca. De cierto modo las redes sociales han logrado democratizar los circuitos artísticos visibilizando el trabajo de uno a distancia”.
Con esta significativa exposición espera llegar a su público de siempre, pero también a nuevas personas que se puedan interesar en su trabajo, principalmente a las nuevas generaciones, pues “mi preocupación siempre ha sido generar interés en las artes visuales en los niños y adolescentes. Siempre a ellos les dirijo mí trabajo y las actividades que hago para poder fortalecer la educación artística que harto hace falta”, dijo.
Próximamente espera centrarse en generar fanzines, publicaciones independientes de un tema en particular, pues al trabajar con grabado le permite producir en la escala que necesite y hacer las ediciones que estime necesarias. En paralelo espera seguir impartiendo talleres en instituciones educativas de la región para incentivar a las generaciones más jóvenes a interesarse en el arte. Pero tampoco le cierra la puerta a la posibilidad de salir de Chile para participar en más instancias artísticas alrededor del mundo.
