Primera institución en Chile en recibir categoría diamante. En 2021 atendió en su unidad de urgencias a 639 pacientes. Hospital ahora está en proceso de postulación para certificarse como centro esencial en Latinoamérica.
Un total de 69 accidentes cerebro vascular (ACV) se producen cada día en Chile, es decir, anualmente casi 25.000 personas se ven afectadas por la enfermedad y, según el Ministerio de Salud, se estima que una persona muere cada una hora producto de la patología, lo que deja al ACV como la principal causa de muerte y primera situación específica que genera discapacidad y fallecimiento prematuro.
Lo anterior, que se repite a nivel internacional, ha hecho que la Organización Mundial de la Salud (OMS) declare a la patología como un problema de salud pública global por su impacto, tanto en costos económicos, sociales y deterioro de la calidad de vida de los pacientes.
De ahí la importancia de un manejo rápido de la patología, diagnóstico, tratamiento y seguimiento de enfermos, tarea en la que Iniciativa Angels distinguió al Hospital Las Higueras de Talcahuano con la máxima categoría, Diamante, que lo convierte en la primera institución en el país en recibirla.
Para Freddy Constanzo, jefe del Servicio de Neurología Adultos del Hospital Las Higueras de Talcahuano, la distinción es la conclusión “de un camino de mejora continua de nuestro hospital desde 2017. La máxima acreditación en calidad de atención en pacientes con ACV que entrega la Organización Europea de ACV y la Organización Mundial de ACV. Certifica que los pacientes tienen altos estándares de calidad en todo su proceso de atención, con métricas comparables entre los centros evaluados”.
Cabe precisar que cada establecimiento comienza con la categoría Stroke Ready Center, para luego avanzar hacia la clasificación Gold, Platino y Diamante, adjudicada en virtud de sus progresos según la atención prestada cada trimestre del año. Ya en 2019 el Hospital Las Higueras había recibido la categoría Platino.
El centro de salud, que atiende a una población de 360.565 personas con corte al 2019, según la oficina de Garantías Explícitas de Salud (GES), durante 2021 confirmó en su unidad de urgencia a 639 pacientes con ACV isquémico, que se produce por un bloqueo del flujo normal de sangre hacia el cerebro, de los que 161 cumplieron con el criterio para ser ingresados a la sala de Neurología. Además, durante el mismo período atendió a 56 enfermos con ACV hemorrágico, patología que es menos frecuente, pero más letal y se produce cuando se rompe un vaso sanguíneo en el cerebro originando un derrame.
De acuerdo al facultativo, este reconocimiento es la suma del esfuerzo de todos los funcionarios de la red del Servicio de Salud Talcahuano, desde los equipos directivos, Garantías Explícitas en Salud, Atención Primaria, Samu, Urgencia, Imagenología, Unidad de Paciente Crítico, Cardiología, Cirugía Vascular, Neurología, Neurocirugía, Medicina Física y Rehabilitación, los que constituyen una cadena de atención. Según detalló Constanzo, actualmente el Hospital Las Higueras está en proceso de postulación a la certificación como Centro Esencial de ACV en Latinoamérica, certificación que realiza la Organización Internacional de Accidentes Cerebrovasculares (WSO) y la Sociedad Iberoamericana de Enfermedades Cerebrovasculares (Siecv ) proceso que es realizado por pares evaluadores extranjeros de forma presencial, “lo que asegura a a nuestros usuarios la máxima calidad de atención disponible para este tipo de servicio”.
Mónica Acevedo, vocera de Reacciona ACV, iniciativa que busca que las personas se cuiden de la patología, exista más acceso a tratamientos y más rehabilitación, sufrió un accidente cerebro vascular que la dejó con secuelas.
Hace 10 años, cuando Acevedo sufrió el ACV no existía mayor información sobre la enfermedad, por lo que no recibió ningún tratamiento en el recinto al que acudió.
“Se me paralizó todo el lado derecho del cuerpo, estuve alrededor de seis meses en silla de rueda y tuve que hacer rehabilitación. Con el tiempo pude dejar la silla de rueda, mover la mano, tenía el rostro menos chueco y me mejoró el ánimo. Ahora tengo que andar con bastón, aún no puedo recuperar el equilibrio y debo realizar ejercicio constantemente porque si no se me atrofia el cuerpo”, comentó.
Acevedo, que ha realizado cursos sobre la enfermedad para informar a la población y que espera que se cree una Ley específica para la enfermedad o que se mejore el Auge, aseguró que ante síntomas como caída del rostro o problemas de movimiento en piernas o brazos deben acudir de inmediato al centro de salud más cercano para evitar secuelas o, incluso, la muerte.
Cabe destacar que el riesgo de presentar un ACV aumenta con la edad y se incrementa si hay antecedentes familiares. Sin embargo, posee una serie de factores de riesgo modificables como el tabaquismo, obesidad, sedentarismo, entre otros, que pueden librar a una persona de sufrirlo.