Con la presencia del presidente Russell M. Nelson se puso en marcha el recinto más austral del mundo. El martes comenzarán las primeras ceremonias.
Expectativa, eso había a primera hora de este domingo en el Templo de Concepción de la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días.
A las 9:15 comenzó la ceremonia de “dedicación” del templo, en donde el recinto se entrega al Señor y queda a disposición de los miembros de la Iglesia para desarrollar distintos tipos de ceremonias.
La actividad del día de ayer, partió con una oración en el “Salón Celestial”, la que fue liderada por el presidente de la Iglesia, Russell T. Nelson quien, acompañado de su esposa, Wendy, recorrieron el recinto.
Vestidos de impecable blanco, en un momento de la ceremonia, salieron desde el templo hacia el ala derecha, en donde los esperaban cerca de 200 personas, entre ellas, 60 en un coro. Allí Nelson hizo unas paladas de cemento en la denominada “Piedra Angular”. Esta piedra contiene documentos del templo, así como información de prensa relacionada con ello.
Durante esta etapa, el profeta Nelson expresó “esto representa la importancia de la Piedra Angular para nuestra iglesia. Es el señor Jesucristo quien está ahí”.
Tras esto, recibió el saludo de un grupo de niños que participó de la ceremonia, para después retornar al Salón Celestial y hacer la consagración final. Con esto, este templo es un lugar sagrado para los miembros de esta Iglesia.
Quienes llegaron a observar este hito, se mostraron emocionados de ver a este profeta a escasos metros.
Cristian Gervic, jefe de asuntos públicos del templo penquista comentó que “es la historia del templo, sobre quienes han venido, fotografías, etc.”
Cabe consignar que durante el día sábado, el profeta Russell M. Nelson sostuvo una serie de encuentros con autoridades locales, entre ellos estuvieron el intendente Jorge Ulloa, quien manifestó que “la ciudad gana con esta construcción, el vecindario mejora su imagen. Y también, desde el punto de vista del crecimiento en la Iglesia, va a experimentar un alza porque la sociedad va a ver a esta Iglesia de una manera diferente”.
Según cifras manejadas por los organizadores, a la actividad asistieron cerca de 4.200 personas, en tres tandas. Durante cada ceremonia, 700 de ellas estaban al interior del templo, otras 500 en el hotel y 200 en la explanada.
Entre el 15 de septiembre y el 13 de octubre, el recinto emplazado en la ex Quinta Junge estuvo abierta a la comunidad, en donde asistieron más de 85 mil personas. “La apertura del templo a la comunidad tiene relación con lo que hacemos aquí. Hubo mucho interés gracias a esto”, explicó Cristián Gervic.
Tras la ceremonia de Consagración, la comitiva encabezada por el profeta Russell M. Nelson retornó desde Concepción a la ciudad de Salt Lake City.