El bus protagonista de la tragedia que enluta a esa comuna no fue el que se contrató por licitación, y sólo cumplía parte de los requerimientos.
El 11 de octubre de este año, la Municipalidad de Tirúa llamó a licitación para contratar un bus para la gira “Pasantía de Agentes de Salud de Tirúa a Icalma”, que tendría una duración de tres días. Este viaje es el que hoy enluta a Tirúa.
De acuerdo a las bases de licitación, a las que tuvo acceso Diario Concepción, las condiciones para postular era presentar un bus con capacidad mínima de 42 asientos, año de fabricación superior al año 2015, contar con baño, asientos reclinables, cómodos y en buen estado de conservación. A lo anterior se suma el equipamiento de seguridad, como extintor y botiquín de emergencia, climatización y los antecedentes técnicos al día. La licitación dejaba bien claro que en caso de alguna falla mecánica, el bus debía ser reemplazado por una de igual o mejores características.
A la licitación postularon dos empresas, una de ellas fue Flota Clacort, que ofreció un bus Volvo del año 2016, de 46 asientos y cuya conducción estaría a cargo de Segundo Cifuentes Mella, con un costo de $1.050.000. Sobre el bus de relevo no existe mención. Mientras que la segunda empresa, postuló con un bus King Long del año 2015, de 44 asientos, y para el reemplazo, uno bus de igual al anterior, pero con año de fabricación 2013. El costo de esta segunda empresa era de $1.090.000.
Al ser Clacort la oferta más económica, fue quien se adjudicó el servicio, pero de lo contratado no llegó nada. El bus que realizó el servicio fue un Mercedes Benz del año 2004.
El asesor jurídico de la Municipalidad de Tirúa, Eugenio Gómez, explicó que “la obligación de la empresa era hacer llegar el bus que había ofertado, lo que tenemos entendido, a priori, es que no es el mismo”.
El funcionario adelantó que el cobro de multas, que están especificadas en las bases, se realizará de todas formas, independientes de las acciones legales que puedan seguir como municipalidad o los familiares de las víctimas. Con respecto a esto, esperarán los resultados de las pericias de la Siat de Carabineros, ya que la persona a cargo del viaje se encuentra entre las víctimas fatales.
Con respecto a las versiones de pasajeros que también declinaron realizar el viaje por las condiciones del bus, Gómez señaló “tenemos entendido que hay personas que decidieron no ir, pero no es efectivo que se hayan bajado del bus por las condiciones, porque no conocían cuál era el bus que corresponde”.
Desde la empresa se defienden y negaron cualquier irregularidad con la licitación y argumentan que utilizaron un bus 11 años más viejo, porque era el único que existía disponible, ya que se encuentran en una época de alta demanda. “Lo que pasa es que ellos licitaron por el portal y Clacort se la adjudicó con una máquina, pero la orden de compra la adjudicaron muy tarde, casi encima del día del viaje, entonces se envió la máquina que está ahí, que le pasó el accidente. Es temporada alta y sólo quedó esa máquina”, expresó Miguel Claro, gerente de la empresa de buses Flota Clacort.
En relación a la situación del conductor, Claro indicó que “era su cuarto día, que él venía de otras empresas, Pullman Tur, Eme Bus, había conducido buses de dos pisos, tenía harta experiencia”.
Este es el bus contratado por la Municipalidad de Tirúa.
El dolor de los familiares
En nueve puntos de la comuna de Tirúa se realizan los velatorios de las víctimas de este fatal accidente. Uno de estos es el sector de Chomidahue, en donde se encuentra la familia del lonco Prosperino Huenupil, Armando Huenupil, expresó que “él siempre estaba disponible a este tipo de viajes, en donde entregaba conocimiento de nuestras tradiciones a la generaciones venideras”.
Armando Huenupil, sosteniendo la foto de su hermano el lonco Prosperino Huenupil.
En la vivienda de su hermano comentó que el lonco Huenupil era querido por toda la comunidad y recordó que la noche anterior al viaje, su hermano pidió que lo recordaran por sus conocimientos en las tradiciones mapuches.
En tanto, que en Los Chilcos se encontraban los restos de Albertina Linguepi y su hija Aylin Huilita de sólo 8 años. El hermano de Albertina, José Linguepi, indicó a Diario Concepción que era habitual que madre e hija realizarán estos viajes. “Siempre la venían a buscar desde las distintas comunidades por su conocimiento, inclusive, durante el viaje habían parado varias veces a recoger hierbas que necesitaban, puntualizó.
Los funerales de estás tres personas se realizarán mañana en el Cementerio mapuche de Tirúa, tras una ceremonia evangélica o católica y el ritual correspondiente. Se espera la llegada de representantes de comunidades ubicadas Alto Bío Bío, Ercilla, Ranquil, entre otras.
Último minuto:
A once aumentaron las víctimas fatales del accidente en la ruta entre Victoria y Curacautín.