Su principal característica es la cercanía con los pacientes y la preocupación por su salud de manera integral. Su principal desventajas con las de cadena es la compra en volumen, pero aún así con genéricos y bioequivalentes logran satisfacer las necesidades de sus clientes.
Si bien, las grandes cadenas de farmacias lideran el mercado, las independientes poco a poco están ganando espacio en el Gran Concepción. Así lo muestran las últimas estadísticas entregadas por el seremi de Salud, Mauricio Careaga.
En la Región existen 297 farmacias privadas, divididas entre las de cadena e independientes, las que en su conjunto experimentaron un crecimiento de 4,4% entre enero de 2016 al 12 de junio de este año.
Según detalló, del total de farmacias existentes el 54% del mercado lo ocupan las de cadena y 46% las independientes, que exhibieron durante esos 12 meses un mayor crecimiento: mientras las de cadenas aumentaron de 157 a 159, las independientes lo hicieron de 128 a 138, es decir, 7,2%.
Tendencia clara
“Prefiero comprar en farmacias chicas, generalmente, encuentro precios económicos y los químicos farmacéuticos son más cercanos al explicar las dosis, los horarios en que tomarlos y los efectos que puede tener, especialmente, en adultos mayores como yo, con enfermedades crónicas”, dijo Juana Otárola, de 78 años.
Héctor Ireland, presidente del Colegio de Químicos Farmacéuticos, afirmó que la tendencia es que las farmacias independientes sigan creciendo en la Región y en el país. “Nos parece bien este crecimiento. El modelo farmacéutico pretende tenerlas como centro de salud – eso viene en la Ley de Fármacos 2- lo que incluye varias prestaciones, como el servicio personalizado. Los colegas que son dueños de farmacias independientes, especialmente, los que han abierto en el último año, no sólo se preocupan del medicamento, sino también de la salud integral del paciente”.
Aclaró que en los profesionales que trabajan en locales de cadena muchas veces su carga laboral es absorbida por temas comerciales y ventas, lo que no les permite la cercanía deseada por el usuario. “Estas farmacias (independientes) son como lo que existía antes que cambiara la Constitución Política en los años ‘80, donde el químico farmacéutico era dueño de la farmacia, lo que le da la posibilidad de emprender y potenciarse, a diferencia de lo que implica participar en una empresa donde no hay posibilidad de crecer como profesional o de generar cambios”.
Eso sí, las independientes tienen una importante desventaja al ser comparadas con las de cadena, principalmente, en el precio en que adquieren los medicamentos, pues sus competidoras al adquirirlos a gran volumen llevan la delantera. “Conseguir buenos proveedores hace la diferencia. Aunque un estudio del ISP determinó que varios productos farmacéuticos están más baratos que en las de cadena”.
Sostuvo que en la Ley de Fármacos 2, que se discute en el Congreso, busca evitar el manejo que los laboratorios y las farmacias hacen para fijar el precio. “La idea es trabajar para que el dueño del laboratorio no sea a la vez propietario de la farmacia de cadena, eso permitirá competir en un mercado más transparente”. Una experiencia positiva
Rubén Sepúlveda, químico farmacéutico y dueño de la Farmacia Concepción, ubicada en San Martín 1029 desde septiembre del año pasado, tiene como objetivo entregar la atención de antaño, previa a la aparición de los grandes conglomerados.
Aseguró que la experiencia ha sido positiva, que las ventas están aumentando de a poco y que ya tiene una clientela fija. “Tenía ganas de emprender, conocía el negocio de las farmacias y de los laboratorios porque había trabajado en ellos y, aprovechando que mucha gente está disconforme por el servicio que entregan las cadenas vi que había una oportunidad de trabajo, pero sin el sello de usura que tienen las grandes”.
Sepúlveda dijo que la idea es entregar todas las opciones al cliente, tanto los medicamentos de marca que el médico les recomienda como los bioequivalentes y genéricos, que tienen un menor precio, lo que se acomoda a su realidad económica.
Manifestó que a pesar que las grandes cadenas cuentan con importantes descuentos, convenios con seguros médicos o con isapres, muchas personas han migrado al sistema antiguo. “No les pedimos el RUT para hacer descuento ni sus datos… Sólo les pedimos que vengan a cotizar y comprueben las opciones”, dijo.
Clientes nos buscan
Mauricio Castro, químico farmacéutico dueño de Biofarmac, ubicada a pasos del Terminal de Buses Collao, abrió hace poco más de un año su farmacia. “Algunos clientes vienen desde Tomé, Penco y Coronel a comprarnos, a pesar de tener que tomar dos buses para llegar, porque no hay locomoción directa, lo hacen porque se sienten confiados que recibirán una buena atención y un buen precio. A la gente le gusta el emprendimiento, especialmente, cuando el químico farmacéutico está 100% en el mesón atendiendo sus consultas, lo valoran”.
Sobre la difícil contienda que representa en materia de precios aseguró que: “Ahí entra la labor de nosotros porque como somos profesionales creen en nuestro trabajo y eso nos respalda por lo que yo creo que cada día aumenta la proporción de químicos farmacéuticos que se quieren independizar, a pesar del sacrificio que implica”.
En funcionamiento
Según Marta Larenas, jefa del sub departamento de Farmacia y Profesiones Médicas de la Seremi de Salud, en la Región existen 297 farmacias, siendo la provincia de Concepción la que concentra el máximo de ellas con 174, seguido de Bío Bío con 50, 49 en Ñuble y 24 en Arauco.
Del total 26 corresponden a farmacias comunales o populares, la mayor parte de ellas están en Bío Bío donde se contabilizan 11, Concepción cuenta con siete, seis en Ñuble y dos en Arauco.
En tanto, entre las farmacias que dejaron de funcionar entre 2016 y 2017 se contabilizan cuatro de cadena y dos independientes, las comunas se mantuvieron sin variación.
Ireland se mostró satisfecho con el proceso de fiscalización que vigila el cumplimiento de los estándares mínimos establecidos en el Código Sanitario, cumplen su rol.