Señora Directora:
El enamoramiento es una etapa relativamente corta en la que se idealiza al otro/a encontrando una fantasía de perfección. Esta idea de amor es efímera. Al pasar el tiempo, si la relación persiste, se logra percibir en su totalidad a la pareja con sus luces y sombras, surgiendo entonces el desafío de comenzar a construir un vínculo con criterio de realidad. Abandonar el proyecto de una relación ante la primera dificultad es una opción válida. Sin embargo, es posible intentar avanzar una vez que el problema se aborda y se trabaja en conjunto su solución.
El amor romántico, en el que existe la creencia de “felices para siempre”, es una construcción social. La vida nos enfrenta a situaciones complicadas y las relaciones de pareja en sí mismas son vínculos complejos, ya que se unen dos personas con una historia de vida particular por lo que no siempre es sencillo llegar a acuerdos, negociar o avanzar juntos en un proyecto.
Considerando lo anterior, será necesario respetar las formas de amar en pareja que pueden ser muy diferentes a la concepción que cada uno tiene, entender que pueden existir quiebres, y que es posible volver a empezar las veces que sea necesario, como también comprender que es factible finalizar una relación aun cuando existe amor, si esa relación no aporta al bienestar emocional.
Ivonne Maldonado-UDLA