Señora directora:

Me permito molestar su atención con el objeto de darle a conocer una problemática que se ha estado asumiendo desde hace bastante tiempo por casi gran parte de la ciudadanía de este país. Me refiero a los pagos que tenemos que hacer por los conceptos de luz, agua, gas, telefonía, TV e internet.

Estas grandes compañías que tienen enormes recaudaciones y las más grandes utilidades año tras año, envían los antecedentes de cobro a los sencillitos y debemos concurrir en la mañana o en la tarde haciendo filas horas y horas.

En dos meses más llegará abril, y por supuesto el mal tiempo. Pobre de aquel que no tenga a mano un paraguas o un impermeable, porque tendrá que llegar a su domicilio a tomar algunas aguas calientes de tilo y flores pectorales para evitar un fuerte resfrío.

Cada año estas empresas reajustan sus tarifas y nadie dice nada. Ninguna autoridad, de las muchas que llegan a los más altos cargos motivados por vocación de servicio público (¿) se ha percatado de esta triste realidad que sufren gran parte de los ciudadanos.

Hoy me correspondió ir a un sencillito a pagar luz y agua, hice una fila donde antes habían llegado sesenta personas y para matar el tiempo cada una con su celular. Fueron dos horas de espera. Hay aquí un delegado presidencial, que se ha visto preocupado de la Macro Zona Sur. Sin embargo, este que es un macro problema y nadie se preocupa de él. ¿Qué deberíamos hacer en esta situación?

Juan Lincopi