Señor Director:

En relación al ya, arduamente comentado, viaje de los hijos del Presidente a China, creo que no es una trivialidad. No basta con generar protocolos para el futuro, ni para sacar ventajas políticas coyunturales, es un tema mucho más serio y profundo, que entra, sin lugar a dudas, en el marco de conductas que atentan contra la ética, la moral y las buenas conductas. Sobre manera de las autoridades políticas del país.

Más allá de lo lícito o no del viaje, el tema en rigor es si en ese evento, está o estuvo la intención de sacar provechos económicos, lo que se torna más grave con la presunción razonable de que el Presidente de la República, una vez terminado su mandato, seguirá siendo hombre de negocios.

Una comisión investigadora, del mas alto nivel, debería, con rigor, estar estudiando e investigando esta situación. Si hubiesen parlamentarios rigurosos y con visión de largo plazo, ya la hubiesen creado.

Juan Luis Castillo Moraga