Con su triunfo, la carta de Apruebo Dignidad, terminó por romper varios moldes. Solo este año se impuso en una primaria que parecía perdida, y a diferencia de lo ocurrido en otros procesos, dio vuelta el resultado de la votación de noviembre, donde alcanzó la segunda mayoría. Ya en su primera contienda electoral como diputado se había transformado en el primer candidato en Chile en quebrar el desaparecido sistema binominal. Ahora, encabezará la administración del Estado con un bloque distinto a todos los que han gobernado desde el retorno de la democracia.
Según voces de la sociología y la ciencia política, quien gobierne enfrentará un escenario con muchas demandas que aún no son respondidas, con una sociedad más empoderada y donde la postura en torno al trabajo de la Convención Constitucional también será clave.
Junto con felicitar al nuevo presidente electo, el timonel del gremio, Dante Arrigoni, resaltó la importancia de que el próximo Gobierno logre conformar un escenario de mayor estabilidad y certidumbre económica que permita recuperar el crecimiento.
A diferencia de lo ocurrido en noviembre, no se observaron aglomeraciones fuera de los locales de votación. Se percibieron problemas de congestión vehícular y, si bien no se produjeron problemas como en otras partes del país, también se notó una disminución del transporte público.
Cuando el conteo alcanzaba el 30% y la tendencia se empezaba a consolidar se escucharon los primeros bocinazos de ciudadanos penquistas que hacían suyo el triunfo del diputado magallánico. En Concepción, de hecho, fue una de las comunas donde se alzó con el triunfo, así como en Talcahuano, Hualpén y Chiguayante.