Quienes lo visitan quedan admirados con la estructura rocosa que está solamente a 10 metros de la orilla
Talcahuano, Penco y Tomé están realizando corta fuegos en las zonas de interfaz, para evitar situaciones como la que actualmente está sufriendo Valparaíso.
Control de operación a través de GPS, posibilidad de nuevos recorridos, mejoras laborales para los conductores y móviles inclusivos son parte de los beneficios.
No todo ha sido violencia y destrozos al comercio como en el centro de la capital regional. En la zona costera, particularmente, en Tomé, Penco y Lirquén vecinos y vecinas se han autoconvocado, organizado y, de a poco, sistematizado sus inquietudes y preocupaciones. Aquí algunos ejemplos.