Nuestro desafío permanente es trabajar día a día por cultivar vínculos basados en el respeto a cada persona, la libertad que busca el bien, la fraternidad, la amabilidad, la justicia, la solidaridad y la acogida de la diversidad en los espacios cotidianos en que desarrollamos la docencia.
La disparidad en la asignación de recursos a nivel nacional radica en la ausencia de una mirada de largo plazo de hacia dónde queremos llegar.
¿Quieren saber que resulta una vez que una nube molecular colapsa?
Esto, sin duda, repercutirá en su vida futura. Si no hacemos todos algo ahora, mañana será tarde.
Hemos demostrado que si ponemos a los habitantes de la región como nuestra mayor prioridad, sí se puede, se puede mucho más.