“No se le debe temer a la robotización y a la cuarta revolución industrial porque, aunque, efectivamente, toda revolución industrial ha conllevado la eliminación de puestos de trabajo, también ha llevado a la creación de muchos otros”.
Para que las negociaciones sean exitosas, se necesita evitar las actitudes intransigentes, promover la existencia de posiciones flexibles.
Corremos contra el tiempo y algunos Estados se niegan a aceptarlo. Esperemos que en la COP26 prime la solidaridad y la conciencia ante esta emergencia climática.
Las Pymes requieren flujo de caja y, por eso, necesitan el máximo de apoyo que les permita retomar su normal actividad.
No somos un nuevo país, distinto al de antes de octubre de este año, simplemente se levantó el velo que nos habíamos puesto para ocultar lo que realmente éramos, que distaba mucho de aquel oasis que algunos privilegiados se representaban.