Según el uniformado, desde la institución han "actuado cumpliendo nuestros protocolos".
Desde la Cidh aseguraron que durante el monitoreo recibieron información relacionada con torturas, violencia sexual, tratos crueles, inhumanos y degradantes durante las detenciones.
“Dentro de las consecuencias más graves es la pérdida auditiva irreversible", advierten los especialistas.