Medidas como estas ayudan a establecer un control sobre una situación que impacta fuertemente en la vía pública. La presencia, por ejemplo, de un caballo en una calle o en una plaza representa un gran riesgo.
Todavía hay un espacio para revertir la situación de Huachipato. Esa es la gran conclusión y esperanza reciente en Talcahuano y es la que tiene relación a apelar ante la Comisión Antidistorsiones.
Al parecer, es una historia que, por lo visto, podría tener otro fin. Sin duda, todo el Biobío espera que sea un desenlace positivo.
Se podría terminar con un vínculo de acero, que hoy está amenazado por una crisis que aún no da luces de salida.
Todos sufrimos con la contaminación en invierno, a lo que suman las enfermedades respiratorias vinculadas al aumento de la circulación de virus.
El festival no sólo se consolida como una propuesta muy atractiva desde lo artístico, sino también como una marca de la ciudad, que la posiciona en diferentes ámbitos.