El confinamiento en que entrarán otras cinco comunas a nivel regional no hace más que confirmar el complicado momento que se vive con la pandemia.
Una reforma no constituye una amenaza. Al revés: se busca dirimir conflictos sobre un recurso que el país debe administrar de manera más eficiente, sustentable y equitativa.
Estudiantes y docentes “fueron capaces de realizar un proceso de enseñanza y aprendizaje de contenidos que van mucho más allá de la inmediatez del contexto de pandemia”, dice el informe de Enseña Chile.
Las reformas legislativas en materia de descentralización son más tímidas de lo que esperan las regiones. Sin el traspaso de atribuciones, competencias y recursos de disposición local, el centralismo seguirá sobreponiéndose a las aspiraciones de construir un Chile realmente descentralizado.