De visita en Concepción, las históricas ex militantes de la DC dieron a conocer sus particulares miradas del estallido social.
De visita por Concepción, dos figuras históricas de la política nacional y otroras militantes de la DC, Soledad Alvear y Mariana Aylwin, analizaron el estallido social desde sus propias miradas.
Hoy trabajan en sus respectivos movimientos. Comunidad en Movimiento, de Alvear; y Progresismo con Progreso, de Aylwin, se unen para trabajar en levantar contenidos que permitan preparar cívicamente a la ciudadanía para el plebiscito de abril, poniendo énfasis en asegurar la participación independiente por una Convención Constituyente.
“Nos parece muy importante juntar otros movimientos y a personas independientes de todo el país con el objeto de sumarse a este desafío que tenemos como país. Vamos a tener una discusión constitucional y nos interesa aportar desde el punto de vista de los contenidos de lo que significa una nueva Constitución”, señaló Soledad Alvear.
Por su parte, Mariana Aylwin comentó que “nos une una profunda preocupación por la democracia chilena y por el momento que está viviendo el país. La convicción es que con una institucionalidad y una convivencia democrática el país pueda avanzar en justicia social, en responder a los anhelos de los chilenos”.
Ambos movimientos de la exministras, más Unión Cívica Republicana, centran su trabajo en la educación cívica de cara a los comicios de abril próximo.
“El proceso constituyente es una oportunidad para hacer pedagogía sobre lo que significa la democracia y lo que significa una Constitución”, agrega Aylwin.
“La mayoría de las personas de este país son personas independientes. Tenemos que posibilitar como país que participe el mundo independiente y no sólo los partidos políticos, en las próximas definiciones”, enfatiza Alvear.
Las ex militantes de la Falange comentaron el desempeño de su antiguo partido en el actual estallido social.
“Milité en la DC durante muchos años y he tomado la decisión personal de no referirme a la DC. Valoré el gesto de los partidos, que no fueron todos, que trabajaron por el acuerdo. Me gustaría ver a los partidos con generosidad y diálogo”, sostuvo Alvear.
Aylwin, en tanto, expresó sobre la DC que “he visto actuando igual que antes de que renunciara al partido, por lo tanto, las razones que me hicieron renunciar creo que se han visto confirmadas en esta etapa. Hay tomas de decisiones que me parecen acertadas en una línea de conciliación, pero el gran problema es que siempre está dividida”.
Tanto Alvear como Aylwin fueron ministras de Estado y, según esa labor, analizan las situaciones que han afectado a los actuales miembros del gabinete presidencial.
“No comparto las interpelaciones. La buena política se mide en los momentos difíciles. La buena política requiere grandeza, liderazgo, consecuencia, hablar con la verdad, respeto, amistad cívica, capacidad de diálogo y mirar el bien común del país”, indicó Alvear, quien fuera ministra de Justicia, Relaciones Exteriores y directora del Sernam, hoy Ministerio de la Mujer y Equidad de Género.
Aylwin se desempeñó como ministra de Educación y, dada esa experiencia, calificó lo acontecido con la PSU como “un golpe muy fuerte a la educación chilena, a una generación de jóvenes. La PSU requería reformas hace mucho tiempo y no se hicieron, ahí hay una responsabilidad”.
Finalmente, Alvear y Aylwin se manifestaron sobre la posición y el trabajo que tendrán en sus movimientos previo al plebiscito constituyente de abril.
“Nuestra definición hoy es la preocupación por los contenidos, contribuir al debate que se pueda producir en la ciudadanía sobre el tema. Compartimos la necesidad de tener voto obligatorio”, detalló Soledad Alvear.
Mientras que Mariana Aylwin puntualizó que “vamos a contribuir a que el proceso sea razonable, con argumentos, pedagógico. Queremos un plebiscito informado, con participación masiva y con garantías a todas las opciones que están en juego”.